El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo desconocer la causa de la renuncia del general Pedro Almazán a la Subdirección de Salvaguardia Estratégica de Petróleos Mexicanos (Pemex). Ello, luego de que Contralínea le preguntara si estaba enterado de que, días antes de su salida, envió un oficio interno en el que hacía un balance de la vulnerabilidad que hay en las instalaciones de Pemex y el riesgo que corren sus trabajadores, ante los ataques del crimen organizado.

Como esta revista lo reveló, en el documento el general Almazán exponía que Pemex se comprometió a reclutar a 10 mil agentes que deberían de sustituir a militares y marinos en el Plan Conjunto contra el Robo de Hidrocarburos, pero hasta la fecha la Administración Corporativa no ha cumplido con ello y ahora sólo cuentan con 1 mil 368 agentes que se dividen en dos turnos para vigilar 7 mil 724 instalaciones terrestres, 306 marinas y 66 kilómetros de sus ductos.

“Yo no sé si ese sea el motivo por el que renunció. A mí no me han informado nada sobre esta situación; pero todos los días vemos el combate al huachicol y la forma como se va avanzando”, afirmó en su conferencia matutina en Palacio Nacional.

Agregó que en Hidalgo es donde hay más tomas clandestinas, donde operan mafias que tienen que ver con la delincuencia organizada; sin embargo, precisó que se ha avanzado, reforzando a la Guardia Nacional, la Marina y Defensa Nacional, proteger a instalaciones estratégicas del país.

López Obrador mostró la gráfica de hoy respecto del robo de combustibles: son 3 mil barriles diarios los que hurtan. “Y miren cómo estábamos: 81 mil barriles se robaban. Y era una asociación delictuosa porque no sólo eran los huachicoleros, eran también las autoridades, que en el mejor de los casos se hacían de la vista gorda”.

Esto, indicó, “se lo debemos a la Secretaría de Marina y a la Secretaría de la Defensa, por eso me llama la atención [lo de la denuncia del general Almazán]”.

El presidente añadió que van a reforzar la vigilancia en Pemex, “porque no queremos ni siquiera los 3 mil [barriles robados], menos el promedio de 4.3 [mil barriles diarios]. Y donde nos está costando más trabajo –también, como la vida pública tiene que ser cada vez más pública y siempre digo lo que pienso– donde nos está costando más trabajo es en Hidalgo, es donde tenemos más tomas clandestinas; pero ya vamos a atenderlo”.

López Obrador agradeció a las Fuerzas Armadas porque, sin su apoyo, “no hubiésemos podido porque, en efecto, son mafias que tienen que ver con el crimen, el llamado organizado o delincuencia organizada. Pero se está avanzando”.

No obstante, descartó que Pemex vaya a contratar 10 mil elementos. “Nosotros estamos reforzando a la Guardia Nacional y se está apoyando a Marina y a la Defensa, pero no puede haber una dependencia, Pemex o la Comisión Federal de Electricidad o el Seguro Social o cualquier dependencia, que tenga su seguridad, no. Eso corresponde a Pemex y a Marina, incluso por ley ellos tienen que dar protección a instalaciones estratégicas y los ductos son instalaciones estratégicas”.

El primer mandatario también reconoció a los trabajadores petroleros. “Estamos sacando adelante a Pemex como estamos sacando adelante a la Comisión Federal de Electricidad fundamentalmente por los trabajadores. Ese es otro cambio, otra diferencia. Sin los trabajadores no se avanza. Estamos saliendo adelante, la verdad, en la Comisión Federal de Electricidad por los trabajadores, porque dejaron todo en ruina los directivos se dedicaron a robar, a saquear; y lo mismo en Pemex”.

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