Elva Mendoza / Érika Ramírez
Luego de 14 años de administraciones del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Distrito Federal, la exlíder de los sobrecargos hace un balance de los pendientes que prevalecen en la capital del país, entre los que destaca la reforma política para que el gobierno local pueda tomar sus decisiones en el ámbito presupuestal y de seguridad.
A casi dos años de haber asumido su actual cargo, la legisladora local dice que “en una ciudad tan grande, la agenda todavía es amplia; con la reforma política se pretende garantizar los derechos plenos a los capitalinos, relacionados con temas trascendentes como los de seguridad y de presupuesto”, explica.
En agosto de 2010, entregó la propuesta de la reforma política del Distrito Federal a los integrantes de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República. El documento fue avalado por todos los partidos a nivel local, así como por el jefe de gobierno Marcelo Ebrard Casaubón.
La propuesta que llevó al Senado de la República propone modificar el artículo 122 constitucional, para dar un nuevo status jurídico al Distrito Federal y convertirla en ciudad capital, así como impulsar su propia Constitución y lograr su autonomía económica y política, manteniendo su carácter de sede de los poderes federales.
Barrales Magdaleno lamenta que la decisión de aprobar la reforma, sea “un asunto que está en el ámbito federal; seguimos en esta indefensión pero nuestra propuesta ha sido fortalecer este consenso que hemos creado. Estamos todas las fuerzas políticas cerrando filas para reclamar los derechos políticos”.
La principal figura de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal es cuidadosa al referirse a los saldos de la administración de Marcelo Ebrard. Reconoce que los conflictos sociales que han generado los megaproyectos del actual gobierno de la ciudad podrían ser heredados al siguiente. Ataja que está de acuerdo con la construcción de la Supervía Poniente, la Biometrópolis y el Foro-Estadio Azcapotzalco.
De la obra que se alza al Sur de la ciudad, en la delegación La Magdalena Contreras –Vía de Comunicación Urbana de Peaje, conocida popularmente como Supervía Poniente–, Barrales Magdaleno dice: “Nos parece que siempre va a ser importante escuchar la voz de los ciudadanos y estar sensible a todos los planteamientos; pero también es importante reconocer que hay que tomar decisiones, planear la ciudad para que siga funcionando y sea habitable los próximos años”.
Al cuestionársele sobre la oposición a esa construcción, señala: “No hay gobierno que reciba la decisión unánime de sus iniciativas”.
Con la Supervía Poniente, que abarcará aproximadamente 5 kilómetros de longitud y unirá Santa Fe con Periférico, el gobierno perredista planea iniciar las vialidades de paga en la ciudad de México. El sistema de túneles y puentes habrá de construirse con inversión público-privada sobre zonas habitacionales y áreas naturales protegidas.
A través de decretos publicados entre el 6 y el 7 de abril de 2010 en el Diario oficial de la federación y la Gaceta oficial del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón determinó expropiar a 126 propietarios en las delegaciones Álvaro Obregón y La Magdalena Contreras.
El proyecto fue concesionado a Controladora Vía Rápida Poetas, Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable (SAPI de CV), empresa conformada por Obrascón Huarte Lain Concesiones México, SA de CV (OHL); Inmobiliaria Copri, SAPI de CV; y Constructora Atco, SA de CV, filial de Copri.
Otro megaproyecto que podría generar escollos en el siguiente gobierno es el de la llamada Biometrópolis, construida en la delegación Tlalpan, no obstante el valor ambiental e histórico del predio Los Encinos, donde 46 hectáreas habrán de ser urbanizadas para la creación de una ciudad “sustentable”. Estudios ambientales han demostrado que con ésta se pone en riesgo la vida de especies animales y vegetales protegidas, endémicas y en peligro de extinción; y la permanencia de cuevas de origen lávico, calificadas como Monumento Natural.
Además, se encuentra el conflicto por el desarrollo del Foro-Estadio Azcapotzalco, construido luego de la desincorporación de bienes del dominio público para beneficio de particulares, principalmente el Grupo Salinas.
Barrales Magdaleno defiende la postura del gobierno de Marcelo Ebrard pero aclara que esos proyectos no fueron “parte de la agenda en la Asamblea”.
Recalca: “No ha sido nuestro planteamiento, no hemos promovido nada en ese sentido. Nosotros creemos que es importante escuchar a los ciudadanos y debemos buscarles espacios. No tienen que estar peleados con que estos espacios sigan siendo promovidos por el gobierno”.
Rechaza realizar una evaluación del desempeño del actual jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón. “La mejor evaluación la tienen sin duda los ciudadanos a la hora de calificarnos en procesos electorales; a todo un partido, a los candidatos, nuestras propuestas y resultados como funcionarios en turno. Ésa es la mejor medición a la que nos vamos a enfrentar”.
Barrales se jacta de ser la presidenta del órgano legislativo local “más productivo” de la República. Con una mayoría perredista, “hemos colocado al Distrito Federal a la vanguardia en materia legislativa” dice. Agrega que se han reformado y aprobado “leyes polémicas”, pero son las que los ciudadanos han colocado como prioritarias.
De acuerdo con el Informe de actividades del segundo periodo ordinario de sesiones, en 24 sesiones plenarias fueron desahogados 131 dictámenes (42 de ellos, iniciativas de ley), presentadas 187 iniciativas de ley y 274 puntos de acuerdo.
Entre los temas que destacan en materia de desarrollo social se encuentra la reforma al Código Fiscal en el ámbito de tarifas de agua y subsidios; se modificó el decreto de presupuesto de egresos para generar certidumbre respecto de la consulta ciudadana sobre presupuesto participativo.
Además, fue reformada la Ley de Atención y Apoyo a las Víctimas del Delito para garantizar atención médica, sicológica y orientación social a los menores de edad víctimas de delitos, entre otras.
A poco más de un año de que se renueve la administración capitalina, Alejandra Barrales no se descarta como futura jefa de gobierno. Comenta que en los siguientes meses “van a empezar a sonar muchos nombres”.
“Son muchos los espacios que hay que renovar: 40 diputaciones locales, jefaturas delegacionales y la propia jefatura de gobierno. Aunque estamos cada vez más cercanos (a la fecha), hay que esperar para comenzar a perfilar nombres”.
Respecto de las divisiones al interior del PRD, comenta que “es de todos sabido que en este partido se tienen visiones diferentes. El origen de nuestro propio partido plantea esas visiones, pero estoy convencida de que vamos a estar a la altura de la ciudadanía. Lo que se requiere es cerrar filas para volver a ser mayoría”.
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