El Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunció que se lograron identificar dos esquemas de evasión de impuestos. En uno de ellos participan más 71 mil patrones coludidos para evadir el Impuesto sobre la Renta (ISR); en el otro, 4 mil personas físicas y morales metidas en una red de factureros. Sólo por el primero de los esquemas de defraudación fiscal se estiman alrededor de 60 mil millones de pesos evadidos en los últimos 3 años.
Las investigaciones corrieron a cargo de especialistas de la Universidad Autónoma de Chapingo (Uach) y de la Universidad Nacional Autónoma de Mexico (UNAM), instituciones con las que el SAT mantiene convenios para la realización de este tipo de estudios.
Mediante un comunicado de prensa, el SAT informó que los resultados de estos trabajos de investigación serán entregados al Congreso de la Unión pero ya sirven para que ambos grupos de evasores sean fiscalizados sin judicialización, “a través de auditorías exhaustivas y especializadas en nómina, mediante un análisis fiscal más detallado que incorpora las inconsistencias detectadas”.
La investigación de la Uach se titula Evasión en sueldos y salarios: redes de patrones. “Su objetivo fue detectar redes sospechosas de patrones que tuvieran la intención de evadir sus obligaciones contributivas relativas al impuesto sobre la renta de la nómina de sus trabajadores”, es decir de las retenciones de impuestos.
Se utilizó tecnología y modelos matemáticos y estadísticos que finalmente identificaron “divergencias entre las y los contribuyentes de referencia y el resto, lo que determinó sospecha de colusión entre patrones y, por tanto, evasión fiscal”.
Entre 2017 y 2019, se pudo comprobar, 71 mil patrones tuvieron relacionada entre el 90 y el ciento por ciento de su plantilla de trabajadores con al menos otro patrón. “Se identificó que algunos de ellos dividían sus pagos al trabajador: uno pagaba sueldos y salarios y el otro pagaba otras remuneraciones (como viáticos y aguinaldo), proporcionando fuerte evidencia de colusión”.
El monto estimado de esta evasión fue de 17 mil 681 millones de pesos para 2017; de 20 mil 268 millones para 2018, y de 22 mil 17 millones de pesos para 2019. Además, se pudo establecer que, en cada año, el 80 por ciento de la evasión estimada estaba relacionada con alrededor del 24 por ciento de este grupo de patrones, “hallazgo” que focalizó la investigación en 4 mil 625 patrones en 2017; 5 mil 55 en 2018, y 5 mil 843 en 2019.
La segunda investigación corrió a cargo de la UNAM. Se titula Evasión tributaria: análisis de redes. Tuvo como objetivo “caracterizar el comportamiento de las redes conformadas por las Empresas que Facturan Operaciones Simuladas (EFOS) detectadas por el SAT”.
Con una metodología basada en la ciencia de redes y de datos, se estudió la emisión de Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI) entre contribuyentes. Se logró dar con el caso de una red de contribuyentes compuesta por 40 por ciento de EFOS o factureras.
Se identificó que las EFOS tienen “preferencia por actividades económicas en torno a servicios de consultoría, administración y supervisión de construcción, así como otros servicios de apoyo a negocios”.
Y se pudo detectar a 4 mil 26 contribuyentes, de ellos 3 mil 784 personas morales y 242 personas físicas, “que interactúan entre diversas redes. Esto permite menor intervención humana en el proceso de una auditoría, para el caso del SAT”.
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