Un director académico puede ganar más que un secretario de Estado o un gobernador. Lo hace posible la UNAM, donde los titulares de escuelas, facultades e institutos llegan a percibir 139 mil pesos al mes –sólo por su desempeño administrativo–, incluso por encima del presidente de la Repúbica. Los sueldos de la “burocracia dorada” contrastan con los honorarios de 3 mil a 8 mil pesos de 30 mil profesores de asignatura, quienes además padecen inseguridad y precariedad laborales
Sesenta y siete directores de las facultades, escuelas e institutos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) perciben hasta 139 mil pesos al mes. Obtienen de este organismo público el doble y hasta el triple de recursos de lo que perciben sus pares de instituciones privadas como el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) o el Instituto Teconológico Autónomo de México (ITAM).
Estos funcionarios de la UNAM reciben en algunos casos más recursos que el presidente de la República y, en su mayoría, más que los secretarios de Estado o los gobernadores, aunque su responsabilidad sea dirigir una escuela, un instituto o una facultad.
Se trata de servidores públicos universitarios que están en la segunda línea de burócratas con mayores percepciones. Se encuentran inmediatamente debajo de los que llegan a cobrar de 139 mil a 189 mil pesos por mes y que están encabezados por el rector, Enrique Graue Wiechers, y su círculo más cercano: Leonardo Lomelí Vanegas, Alfredo Sánchez Catañeda, Luis Álvarez-Icaza Longoria, Raúl Arcenio Aguilar Tamayo y, entre otros, Néstor Martínez Cristo.
Este segundo grupo de funcionarios universitarios con altas percepciones, que revela Contralínea, está integrado por los directores de las escuelas, facultades, institutos y colegios. Con estos 67 se completa un listado de 85 burócratas, identificados por este medio de comunicación, con percepciones mensuales de varias decenas de miles de pesos sólo por labores administrativas. En estos datos no se incluyen los montos que los funcionarios reciben de aguinaldo, prestaciones, bonos y sueldos como académicos.
Todos los directores de las facultades tienen un sueldo bruto formal de 33 mil 845 pesos. A éste se suman los “ingresos adicionales” garantizados que varían en cada caso. Van de los 44 mil 355 pesos a los 82 mil 158 pesos. Otro ingreso mensual fijo es el de “compensación de antigüedad”. En este caso los montos van de los 2 mil 654 a los 23 mil 44 pesos.
En el caso de los directores de las escuelas y de los institutos, el sueldo formal de cada uno de ellos es de 33 mil 814 pesos. Dichas percepciones también se completan con “ingresos adicionales” y “compensación por antigüedad”. Los ingresos adicionales van de 37 mil 565 a 73 mil 656 pesos; y las compensaciones por antigüedad, de 1 mil 618 a 11 mil 20 pesos.
Estos rubros –ingresos adicionales y compensación por antigüedad– componen del 60 al 75 por ciento del total de ingresos de los funcionarios por sus labores ejecutivas y administrativas. En comparación con los directores de otras instituciones, los de la UNAM ganan dos y tres veces más. Según la plataforma Glassdoor, especializada en estadísticas laborales, un director de escuela en el ITAM gana entre 55 mil y 65 mil pesos. En el ITESM, va de los 40 mil a los 90 mil pesos.
Entre los 20 directores de facultades de la UNAM, tres son los que en 2021 superaron los 120 mil pesos mensuales. Alcanzaron de 128 mil a 139 mil cada mes, al sumar los tres rubros con que se integran sus percepciones.
Bajo el cargo de directora de la Facultad de Psicología, María Elena Teresa Medina-Mora Icaza percibió en 2021 un monto por 139 mil 47 pesos cada mes. A los 33 mil 845 pesos de sueldo formal se suman 23 mil 44 pesos de compensación por antigüedad y 82 mil 158 pesos de ingresos adicionales.
María Elena Teresa es hermana del panista Eduardo Medina-Mora Icaza, quien fuera titular del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen: 2000-2005), de la Secretaría de Seguridad Pública (2005-2006), de la Procuraduría General de la República (2006-2009) y, entre otros cargos, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (2015-2019). Dimitió de esta última investidura al darse a conocer que estaba siendo investigado por lavado de dinero por la Unidad de Inteligencia Financiera.
La directora de la Facultad de Psicología también es prima de Manuel Medina-Mora Escalante, expresidente y director de Banamex, institución financiera que fuera vendida al estadunidense Citigroup sin que pagara los impuestos correspondientes por esa transacción en 2001 y que actualmente se encuentra en procesa de venta.
María Elena Teresa Medina-Mora Icaza es egresada de la licenciatura en piscología por la Universidad Iberoamericana. En esa institución obtuvo una maestría en la misma disciplina. Ya en la UNAM obtuvo un doctorado en psicología social. El 20 de noviembre de 2020 fue designada directora de la Facultad de Psicología por la Junta de Gobierno, cargo de que desempeñará hasta 2024.
El año pasado, Germán Fajardo Dolci recibió de la UNAM cada mes 129 mil 301 pesos. Lo anterior, en su calidad de director de la Facultad de Medicina. Además de la remuneración bruta mensual por 33 mil 845 pesos, sus percepciones se completaron con 13 mil 298 pesos de compensación por antigüedad y 82 mil 158 pesos de ingresos adicionales.
Es director de la Facultad de Medicina desde 2016, cuando fue elegido para un primer periodo. Fue reelecto en 2020. Como en el caso anterior, el otorrinolaringólogo no tiene como alma máter a la UNAM. Estudió su licenciatura en la Facultad Mexicana de Medicina de la Universidad La Salle y su especialidad en el Consejo Mexicano de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, en asociación con la propia Universidad La Salle.
Durante el sexenio de Felipe Caderón (2006-2012), Germán Fajardo Dolci ocupó la titularidad de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) y la Subsecretaría de Integración y Desarrollo de la Secretaría de Salud. Es hermano de Guillermo Fajardo Dolci, quien fuera secretario particular del también panista Ernesto Cordero de 2012 a 2018, cuando este último ocupó varios puestos en la administración pública federal.
En 2021 Fernando Macedo Chagolla, como director de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, percibió 128 mil 225 pesos mensuales. A los 33 mil 845 pesos sumó cada mes una compensación por antigüedad por 12 mil 222 pesos y “otros ingresos adicionales” por 82 mil 158 pesos. Es ingeniero eléctrico electrónico y maestro en Ingeniería por la UNAM. Su carrera como funcionario se ha desarrollado al interior de la Universidad.
Otros directores obtuvieron en 2021 percepciones que van de los 100 mil a los 113 mil pesos mensuales. No se trata sólo de directores de facultades sino también de institutos e, incluso, escuelas.
La directora de la Escuela Nacional de Trabajo Social, Carmen Guadalupe Casas Ratia, percibió el año pasado 113 mil 620 pesos mensuales. Gerardo García Luna Martínez, como director de la Facultad de Artes y Diseño, recibió cada mes de 2021 108 mil 856 pesos. Eduardo Vega López cobró, por su parte, 106 mil 460 pesos mensuales como director de la Facultad de Economía.
La directora de la Facultad de Filosofía y Letras, Mary Frances Teresa Rodríguez Van Gort, cobró cada mes 106 mil 460 pesos. Las percepciones mensuales de la directora general de la Escuela Nacional Preparatoria, María Dolores Valle Martínez, ascendieron en 2021 a 106 mil 212 pesos mensuales. Laura Susana Acosta Torres percibió cada mes 105 mil 505 pesos como directora de la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad León, Guanajuato.
Mario Rodríguez Martínez cobró cada mes, por su desempeño como director de la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad Morelia, Michoacán, 105 mil 214 pesos. En el caso del director de la Facultad de Contaduría y Administración, Tomás Humberto Rubio Pérez, tuvo percepciones por 104 mil 129 pesos mensuales. Por su parte, Víctor Manuel Velázquez Aguilar percibió el año pasado 104 mil 50 pesos mensuales por desempeñarse como director de la Facultad de Ciencias.
Las percepciones mensuales en 2021 del director de la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas, Manuel Elías López Monroy, llegaron a 103 mil 991 pesos. Rosa Amarilis Zárate Grajales cobró cada mes 103 mil 620 pesos en 2021. Se desempeña como directora de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia. La directora de la Escuela Nacional de Lenguas, Lingüística y Traducción, María del Carmen Contijoch Escontria, obtuvo cada mes 103 mil 215 pesos.
En el caso del director del Instituto Nacional de Astronomía, José de Jesús González González, las percepciones mensuales durante 2021 ascendieron a 102 mil 956 pesos. Carlos Jorge Robinson Mendoza, como director del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, obtuvo cada mes 100 mil 474 pesos. Y el director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, Pablo Gerardo Mora Tejada, cobró en 2021 un monto mensual por 100 mil 144 pesos.
Otro grupo, con percepciones de 90 mil a 100 mill pesos está integrado por Juan Ignacio del Cueto Ruiz Funes, director de la Facultad de Arquitectura; Raúl Contreras Bustamante, director de la Facultad de Derecho; Juan Manuel Martínez Justo, de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán; Vicente Jesús Hernández Abad, director de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza; Francisco Suárez Güemez, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, y María Teresa Gabriela Frenk Mora, directora de la Facultad de Música.
En este último caso, se trata de la hermana de quien fuera secretario de Salud durante el sexenio de Vicente Fox Quesada (2000-2006), Julio Frenk Mora. Como director de la Universidad de Miami entregó un “certificado honoris causa” a Fox Quesada en mayo pasado. Durante su paso como titular de la Secretaría de Salud, se desviaron recursos a la organización ultraderechista Provida, con los que creó 10 clínicas antiaborto. Además, no pudo explicar qué ocurrió con un lote de más de 1 millón de piezas del medicamento Oseltamivir, que escaseó durante la pandemia de H1N1.
En el mismo grupo de funcionarios con percepciones de 90 a 100 mil pesos se encuentran los directores: Elba Rosa Leyva Huerta, de la Facultad de Odontología; Carlos Amador Bedolla, de la Facultad de Química; Susana Aurora Mgallón Puebla, del Instituto de Biología; María del Pilar Carreón Castro, del Instituto de Ciencias Nucleares; Ana Elena Escalante Hernández, del Instituto de Ecología; Félix Recillas Targa, del Instituto de Fisiología Celular; Manuel Suárez Lastra, del Instituto de Geografía; Ricardo Barragán Manzo, del Instituto de Geología; Rosa María Ramízrea Zamora, del Instituto de Ingeniería; María Imelda López Villaseñor, del Instituto de Investigaciones Biomédicas, y Ramsés Humberto Mena Chávez, del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y en Sistemas.
La lista de funcionarios con percepciones de entre 90 mil y 100 mil pesos mensuales se completa con los directores: José Israel Betancourt Reyes, del Instituto de Investigaciones en Materiales; María Teresa Morales Guzmán, del Instituto de Neurobiología; Jorge Peón Peralta; del Instituto de Química; Diego Rafael Pérez Salicrup, del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad; Luis Alberto Zapata González, del Instituto de Radioastronomía y Astrofisica; Rodolfo Zanella Specia, del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología; Armando Sánchez Vargas, del Instituto de Investigaciones Económicas; Iván Ruiz García, del Instituto de Investigaciones Estéticas; Juan Antonio Cruz Parcero, del Instituto de Investigaciones Filosóficas; Elisa Speckman Guerra, del Instituto de Investigaciones Históricas; Pedro Salazar Ugarte, del Instituto de Investigaciones Jurídicas; Miguel Armando López Leyva, del Instituto de Investigaciones Sociales, y Georgina Araceli Torres Vargas, del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información.
Otro grupo de directores con ingresos mensuales de entre 80 mil y 90 mil pesos son: Jorge Alfredo Cuéllar Ordas, de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán; María del Coro Arizmendi Arriaga, de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala; Carlos Agustín Escalante Sandoval, de la Facultad de Ingeniería; José Luis Palacio Prieto, de la Escuela Nacional de Ciencias de la Tierra; Benjamín Barajas Sánchez, del Colegio de Ciencias y Humanidades; Ana Cecilia Noguez Garrido, del Instituto de Física; José Antonio Seade Kuri, del Instituto de Matemáticas; David García Pérez, del Instituto de Investigaciones Filológicas, y Hugo Casanova Cardiel, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación.
José Antonio Seade Kuri es hermano de Jesús Seade Kuri, actual embajador de México en China, exsubsecretario para América del Norte y exnegociador del Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá (Tmec). Todos, encargos otorgados por Andrés Manual López Obrador
Finalmente, hay siete directores con percepciones mensuales inferiores a los 80 mil pesos. Son los casos de: Laura Alicia Palomares Aguilera, del Instituto de Biotecnología, con 78 mil 488 pesos; Luis Raúl González Pérez, del Programa Univesitario de Derechos Humanos, con 78 mil 387 pesos; José Luis Macías Vázquez, del Instituto de Geofísica, con 76 mil 956 pesos; Marina Elizabteh Rincón González, del Instituto de Energías Renovables, con 76 mil 463 pesos; Raúl Gerardo Paredes Guerrero, de la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad Juriquila, Querétaro, con 76 mil 70 pesos; Francisco Xavier Chappa Carrara, de la Escuela Nacional de Estudios Superiores Unidad Mérida, Yucatán, con 68 mil 295 pesos, y Jaime Urquijo Carmona, del Instituto de Ciencias Físicas, con 68 mil 924 pesos.
Destaca el caso de Luis Raúl González Pérez, quien apenas concluyó su periodo como presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH: 2014-2019), fue nombrado director del Programa Universitario de Derechos Humanos. A su paso por la CNDH defendió las altas percepciones de los funcionarios y se amparó para no bajarse el sueldo. Contralínea documentó un despilfarro de decenas de millones de pesos en amigos “asesores” que cobraron individualmente cientos de miles de pesos sin realizar trabajo alguno.
Francisco Cruz Retama, académico de la Facultad de Economía, lamenta que la burocracia que gobierna la Universidad se despache sueldos anuales millonarios mientras el grueso de profesores y profesoras no tengan un salario digno.
Más del 75 por ciento del personal académico de asignatura y adjuntos perciben salarios que no rebasan los 7 mil 500 pesos mensuales, señala el economista, especialista en sindicalismo y asesor político del Sindicato Nacional de Trabajadores de General Tire de México, entre otras organizaciones obreras.
El contraste entre la precariedad de los trabajadores académicos y la opulencia de la alta burocracia de la UNAM no podía ser mayor, considera. Destaca la “enorme desigualdad” que hay entre los ingresos de una cúpula administrativa, que no tiene funciones académicas, y el grueso del personal académico que sostiene la carga docente y la función sustantiva de la Universidad.
Sostiene que la Universidad requiere de un Congreso Universitario que reoriente la manera en que se ejercen los recursos y se gobierna la institución. Advierte que la sociedad debe acompañar a los académicos y a los estudiantes que demandan una reforma a la institución.
Zósimo Camacho/Segunda y última parte
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