Acabaron con Pemex y con el petróleo

Lo que parecía imposible ocurrió. Gobiernos priístas y panistas, en colusión con funcionarios y empresarios corruptos, saquearon y quebraron la industria petrolera nacional durante 40 años. Siete presidentes de la República son responsables de ello, por permitirlo.

Nuevos abusos con el Derecho de Trámite Aduanero

Hace 24 años funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, encabezados por Francisco Gil Díaz, inventaron un negocio redondo: una contraprestación privada que, sin calificarla como un impuesto, entra a las arcas de la dependencia federal al margen del presupuesto público.

La simulación del imperio de la ley

Lo cotidiano en la política mexicana es que sus actores principales cometan abusos sin sufrir consecuencia alguna y puedan repetirlos una y otra vez sin que alguien se los reclame, como si no hubiera una memoria colectiva. Aun más, esos abusos van acompañados del cinismo de nuestros políticos, de tal manera que cometen arbitrariedades y al mismo tiempo dictan conferencias o hacen declaraciones para censurar la corrupción de la cual ellos han sido responsables.

Encubre Meade impunidad de Rosario en Sedesol

Meade, Chong y Robles

Un observador que presenció aquella mañana de finales del año pasado la salida de Rosario Robles de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) nos comenta el fuerte enojo de la funcionaria experredista porque el presidente Enrique Peña Nieto la cambió a la Secretaría de Desarrollo Agrario. Enfurecida por la decisión presidencial, Robles ordenó vaciar la oficina que ocupó hasta ese 28 de agosto y cuando llegó su sustituto, José Antonio Meade, no había una silla donde sentarse ni tampoco un escritorio que le permitiera despachar en su primer día como titular de la Sedesol.

Recortan 25 por ciento presupuesto a libros de texto gratuitos

Hemos escuchado insistentemente a través de los medios la “preocupación” del gobierno federal por la educación en México, razón por la cual el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, se lanzó en una cruzada de violencia verbal, acompañada con la presión de la fuerza pública federal, en contra de la disidencia magisterial agrupada en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), para arrancarle los privilegios que tenía con el manejo del presupuesto y la disposición discrecional de las plazas de maestro, pero sobre todo para evaluar su desempeño desigual y abrir con ello una puerta de salida que le permita a la Secretaría de Educación Pública (SEP) despedirlos cuando se le antoje.