El Charras fue el alias de Efraín Calderón Lara (1947-1974), quien desde sus años de estudiante, en la licenciatura de derecho, organiza y asesora sindicatos obreros en su natal Yucatán, cuando Carlos Loret de Mola (Mediz) era el gobernador (1970-1976) y fue secuestrado y brutalmente asesinado. El Charras (ignoro por qué el sobrenombre ni qué significa en la jerga popular yucateca; pero, en Sonora, charra significa chiste y/o anécdota entre veras y bromas que empieza con “te voy a contar una charra”) fue un tipazo entregado a las luchas sociales de los trabajadores y mucho muy estimado en la comunidad estudiantil universitaria.
Su homicidio trascendió Yucatán y el país conoció de la barbarie del abuso del poder para deshacerse de quienes no puede sobornar ni hacer cambiar de conducta a ningún precio, por parte del caciquismo de los desgobernadores en las entidades, a los que sólo controló el presidencialismo priista, pero que en sus cotos de corrupción y abusos eran (siguen siendo) caciques de horca y cuchillo, para imponer su autoritarismo que llega a la criminalidad. Lo sucedido al Charras es, en las páginas de la novela de Hernán Lara Zavala, el motivo de una excelente narración en términos de una radiografía del poder, la manipulación y el asesinato político, por medio de una prosa con imán literario que capta al lector, para no soltar el libro de 200 y pico de páginas hasta devorar sus 25 capítulos.
Novela de un crimen ordenado desde la gubernatura, que el autor (¿familiar del Charras?) cuenta impecable e implacablemente, para que ese homicidio no sea sólo otro muerto. Hernán Lara Zavala sabe escribir con un manejo atractivo del lenguaje con el que teje el contenido de este reportaje y le da forma de novela de un homicidio acaecido en febrero de 1974. Una década después, en febrero de 1986, en un supuesto accidente de carretera, muere el exgobernador Loret de Mola, político y periodista al que la información del trágico final de Efraín Calderón Lara no dejó de involucrarlo.
Es una novela realista y documentada con tal información que precisa quiénes y cómo, cuándo y dónde, el líder obrero fue víctima de los que, desde el poder, impunemente matan al estilo de la delincuencia.
El autor logra mezclar la realidad, que “es más pródiga que la más febril fantasía”, con su prosa y su capacidad para narrar, para contarnos otra historia del asesinato político. Y es que el Charras, con su capacidad de dirigente obrero y luchador de las causas sociales, se había convertido –intransigentemente honrado, valiente y de una eficacia sindicalista a toda prueba– en el clásico combatiente por los derechos obreros, a quien el abuso del poder intolerante y corrupto quería muerto. Esta novela, para quienes conozcan o no el hecho, es conmovedoramente atractiva por la belleza de su prosa para recrear un recuerdo social.
Ficha bibliográfica:
Autor: Hernán Lara Zavala
Título: Charras
Editorial: Punto de lectura
cepedaneri@prodigy.net.mx
Senador Javier Corral habría operado contra reelección de Rosario Piedra; él lo niega Nancy Flores,…
Desde hace varios años, el abuso de metanfetaminas es el problema de salud pública más…
Cada elección en el país vecino, exhibe las miserias de la “democracia americana”. Dicen que…
En el informe anual Hielo perdido, daño global, presentado en la 29 Conferencia de las…
Al entregar el Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal 2025 a la Mesa de la…
En diferentes medios de comunicación, nacionales e internacionales, se ha estado diciendo que en México…
Esta web usa cookies.