El próximo domingo 9 de marzo, al mediodía, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunciará las medidas arancelarias y no arancelarias que aplicará México contra Estados Unidos, tras el anuncio del presidente Donald Trump de aplicar aranceles del 25 por ciento generalizados a nuestro país. Para ello, convocó al pueblo a asistir ese día al Zócalo capitalino, y a defender a nuestra patria y su soberanía.

En un mensaje contundente –que lanzó esta mañana desde Palacio Nacional–, la primera mandataria indicó: “hago un llamado al pueblo de México, a todas y a todos, a enfrentar juntos este desafío. A mantenernos con unidad. Reitero, es tiempo de la defensa de México y su soberanía. Debemos estar atentos y tener tranquilidad, cabeza fría, es muy fuerte y poderoso nuestro pueblo y nuestra bendita Nación”.

Asimismo, convocó al pueblo “a una asamblea informativa en el Zócalo de la Ciudad de México el próximo domingo a las 12 del día, para compartirles las acciones que emprenderemos. Y entre todos afrontar juntos este desafío. Orgullosamente, somos un país libre y soberano. Juntas y juntos saldremos adelante”.

Al inicio de su conferencia matutina, la presidenta Sheinbaum destacó que ayer 3 de marzo y después de 30 días de pausa, el gobierno de Estados Unidos “decidió unilateralmente imponer 25 por ciento de aranceles a las exportaciones de México, a pesar del Tratado Comercial firmado por el propio presidente Trump en su primer mandato y de que, en este periodo de tiempo, en estos 30 días, se desarrollaron acciones contundentes contra la delincuencia organizada y el tráfico de fentanilo, así como reuniones bilaterales de seguridad y comercio, que llegaron a acuerdos sustantivos de cooperación entre ambos países”.

La titular del Ejecutivo federal también se refirió al comunicado que publicó la Casa Blanca por la noche del 3 de marzo, el cual calificó como “ofensivo, difamatorio y sin sustento sobre el gobierno de México que negamos rotundamente y condenamos categóricamente”.

Sheinbaum Pardo indicó que, desde el inicio, su gobierno ha “trabajado y dado resultados en materia de seguridad. Por ejemplo, en el caso de tráfico de fentanilo, las propias cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de ese país (CBP, por sus siglas en inglés) muestran que las incautaciones de fentanilo en Estados Unidos provenientes de México, se redujeron en 50 por ciento de octubre de 2024 a enero de 2025”.

En estos 5 meses, detalló, se han asegurado 6 mil 998 armas de fuego –75 por ciento de las cuales provienen de Estados Unidos– y 121.4 toneladas de

drogas (incluyendo 1 mil 260 kilogramos y 1 millón 332 mil 126 pastillas de fentanilo); se han desmantelado 329 laboratorios clandestinos para la elaboración de metanfetaminas, e incautado la cifra histórica de 26.4 toneladas de cocaína en operaciones marítimas. Asimismo, se detuvieron 13 mil 858 personas por delitos de alto impacto y recientemente fueron trasladados 29 personas privadas de su libertad, acusadas de graves delitos relacionados con violencia y narcotráfico, a Estados Unidos, para beneficio de la seguridad de ambos países.

Entre octubre de 2024 y febrero de 2025, se reporta también una reducción de homicidios dolosos del 15 por ciento. “Por ello, somos enfáticos: no hay motivo, razón ni justificación que soporte esta decisión que afectará a nuestros pueblos y naciones. Lo hemos dicho de diferentes formas, cooperación y coordinación, sí; subordinación, intervencionismo, no. A México se le respeta, somos naciones iguales”.

Sheimbaum Pardo recordó que México colabora, por razones humanitarias, para evitar el tráfico de drogas ilegales a Estados Unidos. No obstante, apuntó que el gobierno de Trump también debe hacerse cargo de la crisis de consumo de opioides que causa tantas muertes entre estadunidenses adictos.

“Es un problema de salud pública profunda que deben atender. Asimismo, deben actuar contra los grupos delictivos que internan de manera ilegal a través de sus puertos y aeropuertos los precursores de fentanilo, así como la delincuencia que produce, distribuye y vende ilegalmente el fentanilo y otras drogas, en su territorio, envenenando a sus habitantes.”

La presidenta Claudia Sheinbaum expuso que datos del propio CPB –publicados por el Instituto Cato de Washington– revelan que el 80 por ciento de los detenidos en los puertos de entrada de Estados Unidos por tráfico de fentanilo, entre 2019 y 2024, es de origen estadunidense. Adicionalmente, la comisión de sentencias de Estados Unidos informa que el 81.9 por ciento de los procesados por tráfico de drogas es de esa misma nacionalidad.

Además, recordó que desde el 8 de enero pasado, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reconoció el grave problema del tráfico de armas de ese país a México: 74 por ciento de las armas de alto poder incautadas aquí provienen ilegalmente del vecino del norte.

“Es tiempo de que asumamos cada país nuestro compromiso. En Estados Unidos la crisis de consumo de opioides que se ha desatado, inició con la aprobación irresponsable de fármacos por parte de la FDA. Un juicio contra una farmacéutica en su propio país, demostró que la aprobación del primer fármaco con opioides que se vendió y promovió masivamente, se basó en información alterada para la aprobación de la propia FDA. La coordinación entre ambas naciones es necesaria para atender el fenómeno de la violencia y el tráfico de drogas, pero siempre basada en el respeto”.

La presidenta de la República aclaró que siempre buscará una solución negociada en el marco de respeto nuestra soberanía. “Pero la decisión unilateral que toma Estados Unidos, afecta a las empresas nacionales y extranjeras que operan en nuestro país y afecta a nuestros pueblos. Por ello hemos decidido responder con medidas arancelarias y no arancelarias que anunciaré en plaza pública el próximo domingo”.

Sheinbaum Pardo expuso que las medidas que México tomará no buscan iniciar una confrontación económica o comercial, cuando lo que ambas naciones deberían de estar construyendo es lo contrario: “integrar más nuestras economías para fortalecer nuestra región ante el avance económico y comercial de otras regiones. Pero, es inconcebible que no se piense en el daño que se va a causar tanto a ciudadanos y empresas de los Estados Unidos por el incremento en los precios de los artículos que se producen en nuestro país, como también el daño que se va a provocar por detener la creación de empleos en ambos países. Nadie gana con esta decisión, por el contrario, afecta a los pueblos que representamos”.

En su mensaje a la nación, también recordó que “nosotros tenemos fincado el crecimiento desde hace 6 años, en el fortalecimiento del mercado interno, la creación de empleos mediante inversión pública, el aumento al salario mínimo y los Programas del Bienestar. Además, recientemente presentamos el plan México para fortalecer la inversión para el mercado interno. Fuimos capaces en los tiempos lamentables de tristeza y de desolación ocasionados por la pandemia de levantarnos cuando se cayó la economía como nunca había sucedido en la historia moderna del país. En dos años nos levantamos. Tenemos una economía fuerte y sobre todo un pueblo empoderado, consciente, que se ha convertido en la principal fuerza política”.

Y también se comprometió a seguir buscando el diálogo para encontrar una alternativa con argumentos y racionalidad. Por ello, anunció que el jueves 6 de marzo sostendrá una llamada telefónica con Trump para tratar de acordar un escenario distinto, previo al anuncio del domingo 9 de marzo.

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