La guerra contra la privacidad

Desde antes del famoso caso del Iphone que el FBI no puede desbloquear, ya existía un antecedente de la presión contra una empresa para que se haga harakiri tecnológico y deje de ofrecer privacidad a sus usuarios. Se trata Telegram.

Viviendo desde la pantalla

Niños que van por el mundo sin despegar la mirada de la pantalla de sus teléfonos, están presentes pero mentalmente ausentes en las reuniones, en el cine revisan su Facebook, ellos son quienes gobernarán el mundo en unos años.

Privacidad cero

Pronto no tendremos derecho a la privacidad pues para algunos gobiernos, todos somos criminales en potencia.

No te aprendas contraseñas, usa una fórmula

La contraseña se ha convertido en un bien muy valioso, más apreciado por los hackers que por los usuarios. Para los primeros es una puerta de acceso a un botín económico; para los segundos, una monserga: un paso que hay que cubrir antes de leer su correo o acceder a sus redes sociales.

Hackers, amenaza mundial

Las comodidades que nos brinda la tecnología actual son muchas. La ciencia ficción nos ofrecía la idea de automóviles voladores y robots ayudando en la vida diaria; ellos no han llegado aún, pero el internet sí que se aproxima a la vida del siglo XXI. En 1974, Arthur C Clarke nos hablaba de las computadoras personales y la idea primitiva del internet, donde podríamos buscar información o reservar y comprar boletos sin salir de la casa. Su uso sería tan común como lo era el teléfono en 1970.