Cuatro historiadores revisan y actualizan la Segunda República Española

Cuatro historiadores revisan y actualizan la Segunda República Española

I. Todas las creaciones humanas han de estar en constante revisión, tanto por las adiciones de esa constante creación, como por la información sobre los acontecimientos históricos. Ésta es la forma de actualizar los rendimientos de la investigación que amplían las perspectivas sobre lo que genera el pensamiento y su acción (la teoría y práctica de que nos ilustra Immanuel Kant en su ensayo con ese nombre) a través del diario acontecer humano en el tiempo y espacio, en expansión por una continuidad científica (con Einstein, Popper, Hawking, Galileo, Newton, Coppernico, etcétera, como piedras de toque) que no cesa de ofrecer nuevas respuestas a los problemas de las ciencias de fundamento matemático y las de fundamento jurídico-político, en las artes y la cultura, fraccionada en cada Estado-nación, pero con el toque de universalidad. Son muchos los grandes clásicos que se han escrito sobre la historia universal con base en la documentación, desde Tucídides hasta el 11 de septiembre (de 2001), como nos pone al tanto el libro Reportajes de la historia, relatos sobre hechos ocurridos en 26 siglos (Martín de Riquer y Borja de Riquer, Acantilado); y Las grandes entrevistas de la historia, desde 1859-1992 (Christopher Silvester, Aguilar, 1993 y 1997).

II. Hay libros clásicos de historia universal como los de Leopold Von Ranque, Veit Valentín, Herbert A L Fisher, J R Salis, Ernest Samhaber, Ernest J Görlich, Theodor Mommsen, Tito Livio, etcétera. El libro en cuestión, La Segunda República, versa sobre “el primer régimen democrático instaurado en España en el siglo XX, cuyo afán reformista fue guillotinado por el más dramático de los finales” (Tereixa Constenla, suplemento Babiela de El País, 6 de junio de 2015). Esa Segunda República asombró al mundo por su logro utopista alcanzado. Fue real y no lo parece a distancia, donde no había partidos sino candidatos: “No se votaba partidos, sino a personas”. Y nos recuerda el clásico de Gabriel Jackson sobre el segundo republicanismo (La República española y la Guerra Civil). La Segunda República recrea aquel periodo político, civil y jurídico en busca de la utopía que se logra en gran medida y ha quedado en la historia universal como el gran logro de España para la humanidad. Minorías y mayorías por primera ocasión fueron iguales y se las arreglaron en el estira y afloja democrático-republicano donde las libertades alcanzaron su plenitud. No fue simple teoría. Lo hicieron práctica quienes habían creado el liberalismo político (el económico fue rendimiento inglés). Abarca la Primera República (1873-1874), y que en 1931 se instauró la Segunda, hasta 1936, con el golpismo militaroide, antes de Primo de Rivera (Javier Tusell, Radiografía de un golpe de Estado: el ascenso al poder del general Primo de Rivera, Alianza) y luego con el nazifascista Francisco Franco, dictador de 1936-1979.

III. España ha tenido “demasiados retrocesos”, a decir del historiador Ramón Carande. Y así es desde la monarquía de Isabel-Fernando a la época actual con Rajoy, el todavía primer ministro, y que se abre la posibilidad del desplome del Partido Popular promonárquico-franquista. La República abortada por el franquismo “estuvo marcada por un espíritu reformista que, en algunos mundos rígidos como el campo, pareció revolucionario […]. Fue el primer régimen amigo de las mujeres: se aprobó el sufragio femenino en igualdad de condiciones con el masculino (a los 23 años); se les concedió la igualdad jurídica y desapareció el delito de adulterio, que las penalizaba”. Analizada la Segunda República a la luz de la investigación de estos historiadores, ofrece una panorámica más completa y objetiva; y cómo los republicanos dieron auge a las bibliotecas y edición de libros dentro del marco más amplio de difusión de las ideas modernas. Fue un hecho singular que influyó, incluso, más allá de las fronteras de la península. Y continúa siendo fuente de reflexión para advertir de los fenómenos golpistas de Estado que no han cesado. Avasallada por el fraquismo y el nazismo, ese republicanismo mantiene su vigencia como piedra de toque para mantener el alimento político de la política democrática y republicana (David Runciman, Política, editorial Turner, 2014, con traducción de Marta Alcaraz).

Ficha bibliográfica:

Autores: Ana Martínez Rus, Eduardo González Calleja, Francisco Sánchez Pérez y Francisco Cobo Romero

Título: La Segunda República

Editorial: Pasado y Presente

*Periodista

[BLOQUE: MISCELÁNEO] [SECCIÓN: EX LIBRIS]

 

 

 

 

Contralínea 457 / del 05 al 11 de Octubre 2015