Telecomunicaciones: mucho estruendo, pocas leyes y perversas
Vino nuevo en pellejos viejos. Para justificar la imposición de un nuevo ciclo de las desacreditadas, antisociales y en bancarrota contrarreformas estructurales neoliberales como son la educativa, la fiscal, la energética o en las telecomunicaciones, ahora pintarrajeadas con la pátina del pelambre priísta, devenido del vistoso tricolor nacionalista-revolucionario al lustre rata-gris que asume la estafeta para seguir esparciendo el bacilo de la peste del prehistórico liberalismo económico, Enrique Peña Nieto y sus falanges no han dudado en desempolvar la anticuada, desgastada e insultante monserga priísta. Con la alternancia, Tartufo retornó como publicista gubernamental.