La fecha 24 de abril de 1921 es escrita por Ramón López Velarde (1888-1921) al pie del poema La suave patria. Días antes, había corregido las copias de la imprenta, que se publicaría post mórtem al mes siguiente, celebrándose ahora los 90 años de esa gran creación el sentimiento puro del sublime poeta mexicano-universal. Sublime por la belleza, lo bello, de su poesía, que alcanza en La suave patria el máximo amor a la humanidad a través de ese canto que sintetiza lo más humano del sentir mexicano. “La poesía es el arte originario de todas las artes”, escribe Walter Kinkel, en su ensayo La estética del sentimiento puro de Hermann Cohen. “La poesía avanza de la epopeya a la lírica y de ésta al drama y la novela, a la música (Mozart, Beethoven…) y a la ópera”.
¡Qué poema, qué versos! para biografiar a la patria. Y cantarnos y contarnos una historia que navega “por las olas civiles” para hacernos vibrar con esa fantasía que le puso pinceladas de alegría a la realidad vista desde la perspectiva de López Velarde. Una patria que se concibe como un ideal, utopía que sí existe en esos versos de amor a lo humano-mexicano, donde (para decirlo con Cohen-Kinkel) “la alegría siempre está asociada con la melancolía”. Así es el poema de López Velarde, además de las profecías que vislumbró: “Los veneros de petróleo (que nos escrituró) el diablo”, y aquel verso: “Y entre los tiros de la policía”. Leerlo en voz alta, a los cuatro vientos, para que el sentimiento nos desborde hasta hacernos reflexionar, ahora más que entonces, que La suave patria “como la sota moza, patria mía / en piso de metal, vives al día / de milagro, como la lotería”.
Este poema es un himno a la mexicanidad patriótica, con el cual se puede sentir el compromiso de lo humano universal, como en aquel otro himno donde se proclama que “los hombres todos hermanados quedan”, de Friedrich Schiller, que precisó, con versos inmortales, también lo de que “no está fuera / ahí lo busca el loco / está dentro de ti / tú lo creas perennemente”. Y es que a López Velarde su amor a su patria “impecable y diamantina” le nace de su sentimiento para generar un ramillete de versos sobre un país-patria que permanece vigente, fuera del tiempo y el espacio cuando lo escribió, para dejarnos un testimonio patriótico.
La suave patria es un poema para que cada quien lo interprete y lo comprenda a su manera; no hay un significado universal. Son un total de 153 versos y en cada uno de ellos su autor fijó su concepción de su patria y nos convida a sentirla tal cual, fijada en los instantes románticos de su creación estética. Es el amor a lo que ve, siente y piensa sobre el conocimiento que tiene de la patria a la que le propone la clave para su dicha: “Sé siempre igual, fiel a tu espejo diario”. En el glorioso poema La suave patria está sintetizada la genialidad poética de Ramón López Velarde.
Ficha bibliográfica:
Autor: Ramón López Velarde
Título: Obras
Editorial: Fondo de Cultura Económica
*Periodista