En México han ocurrido al menos 1 mil 161 desapariciones forzadas, revela información oficial. Y es que en los 10 años de vigencia del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED) se han registrado poco más 34 mil casos, de los cuales 33 mil 513 se consideran extravíos y, el resto, desapariciones forzadas.
El RNPED evidencia que en cinco estados de la República los índices de personas no localizadas se incrementaron de 2007 a 2017. Tamaulipas encabezó la lista, con 6 mil 193 casos; seguido del Estado de México, con 4 mil 243; Jalisco, con 2 mil 991; Sinaloa, con 2 mil 834; y Nuevo León, 2 mil 584 personas no localizadas.
Tanto en desapariciones forzadas como en extravíos, los datos indican que los varones son el sector de la población más vulnerable: 970 casos de desapariciones forzadas fueron hombres contra 191 de mujeres. 24 mil 722 extraviados fueron hombres contra 8 mil 191 mujeres.
Pese a la ratificación de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas en 2008 y la reciente expedición de la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas en 2017, este delito continúa.
Ejemplo de ello es el caso de Marco Antonio Sánchez, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México desaparecido después de sufrir una detención arbitraria a inicios de año por parte de la policía capitalina y posteriormente encontrado. Su salud física y mental, aún afectada.
Jordana González