A partir de enero de 2026 iniciarán las inscripciones al Registro Nacional de Salud, con el objetivo de que todas y todos los mexicanos cuenten con una credencial única. Con este sistema, no importará si se está afiliado al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o al IMSS Bienestar, pues el historial médico podrá compartirse entre las tres instituciones, informó la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
En su conferencia matutina, indicó que esto permitirá consolidar un esquema integral de atención que garantice que cualquier persona pueda recibir servicios médicos en cualquier institución a partir de 2027, sin importar su afiliación.
Ayer 5 de octubre, al presentar el balance de su primer año de gobierno, Sheinbaum Pardo también destacó el fortalecimiento del sistema de salud como una de las acciones prioritarias para el próximo año de su administración. “Estamos convencidos del humanismo mexicano de la Cuarta Transformación, de la economía moral, de que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre y de que por el bien de todos primero los pobres, en pocas palabras, ese es nuestro modelo”.
Asimismo, detalló que la producción nacional para el mercado interno se fortalecerá con la puesta en marcha de los Polos del Bienestar en el sureste del país, que comenzarán a operar a principios de 2026.
La primera mandataria expresó su confianza en consolidar acuerdos comerciales con Estados Unidos, Canadá, China, Europa y otros países asiáticos, con el fin de brindar certidumbre a la inversión durante el próximo año.
Claudia Sheinbaum anunció la continuidad y ampliación de los programas del Bienestar. En 2026, las y los estudiantes de primaria recibirán una nueva beca, que se distribuirá de forma gradual hasta alcanzar la cobertura universal. Además, se ampliarán las preparatorias y universidades públicas para garantizar que más jóvenes continúen sus estudios.
Finalmente, la presidenta destacó el reforzamiento de las obras de infraestructura, como los trenes de pasajeros, carreteras, aeropuertos, proyectos de saneamiento de agua y las obras energéticas que impulsarán a Petróleos Mexicanos y a la Comisión Federal de Electricidad. “Este año iniciamos con las grandes obras; el próximo año el empleo va a crecer de manera muy importante por la inversión pública y la inversión privada”.



















