El país que queda
Hay dos versiones de cuál es el México que quedará después del fin del gobierno del presidente Felipe Calderón.
Una, impulsada desde las propias trincheras del gobierno, nos dice que lo que queda es una voluntad indomable de luchar con todas las fuerzas del Estado contra el narcotráfico y la delincuencia organizada. Esa versión también insiste en que los gobiernos anteriores permitieron el narcotráfico o pactaron con él.
La urgencia de una reforma militar
La crisis generada por el arraigo de varios generales del Ejército Mexicano, investigados a raíz de un señalamiento de supuesta complicidad con el narcotráfico, exhibe las grietas existentes entre la cúpula militar y la rama civil del gobierno. Más que una evidencia de la corrupción militar, el tiempo y forma de esta acusación revelan que más probablemente responda a un interés político mezquino y transitorio que a la convicción institucional de limpiar a fondo a las Fuerzas Armadas de la contaminación que haya provocado la delincuencia organizada.
Seguirá la aberración jurídica de la justicia militar
México vive un riesgo formidable a su crecimiento democrático con la alianza entre una facción política y otra militar pronta a detener cambios legales que menoscaben las prerrogativas castrenses, entre ellas, las condiciones particulares del sistema de justicia militar.
Alianza militar: siempre cerca, siempre lejos
La reunión trilateral de ministros de Defensa de América del Norte demostró que entre los ejércitos de México, Estados Unidos y Canadá hay puentes que los unen, pero más abismos que los separan. El puente en boga es, por supuesto, la lucha contra el narcotráfico. Estamos presenciando una especie de reedición de la Iniciativa […]
El control parlamentario de los servicios de inteligencia
Los organismos de inteligencia debieran ser la primera fila de protección ante las amenazas más graves al interés nacional. Desafortunadamente eso no siempre es así.