FOTO: CUARTOSCURO.COM
El operativo para la captura de Ovidio Guzmán –alias el Ratón–, líder de la facción Los Chapitos, del Cártel de Sinaloa, estuvo a cargo de militares de Fuerzas Especiales, quienes cuentan con capacitación de infiltración, arresto y rescate en escenarios de guerra. Éstos habrían actuado de forma sincronizada con bases de inteligencia, conectados con monitoreo en tiempo real y, apoyo aéreo de helicópteros y drones.
En la incursión militar para detener al hijo del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera –preso en Estados Unidos– se empleó tecnología de alta gama, personal élite y un soporte de expertos en inteligencia. Las Fuerzas Especiales –tierra, aire y mar– que accionaron en Jesús María, Sinaloa, cuentan con capacitación al más alto nivel.
Dichos militares están a nivel de “boina verde” y cuentan con instrucción para actuar en guerra no convencional, defensa interna en el extranjero, acción directa, contrainsurgencia, reconocimiento especial, contraterrorismo, operaciones de información, contraproliferación de armas de destrucción masiva, asalto y asesoramiento-actuación en tareas de seguridad anticrimen organizado, revelan informes de inteligencia militar.
Con la misma precisión y destreza con la que se detuvo a Ovidio Guzmán en una población semirrural, fueron capturados otros líderes del crimen organizado en otras condiciones: en la sierra, a Rafael Caro Quintero, el 15 de julio de 2022; en un lujoso edificio de la colonia Nueva Anzures, Ciudad de México, a Dámaso López Núñez, el 2 de mayo de 2017.
En paralelo, los grupos de élite han ubicado y desmantelado: “narcobodegas”, interceptado cargamentos de droga, vehículos de colección y, congelado millonarias cuentas bancarias.
El informe titulado Plan Anual de Actividades 2023 de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) –al cual tuvo acceso Contralínea– da cuenta de la constante capacitación e intercambio de información y experiencias entre Fuerzas Especiales y expertos de los Comandos Sur y Norte con México. En estos encuentros homologan procedimientos expertos de Canadá, Estados Unidos y México.
Este 2023, las reuniones continuarán para reforzar la seguridad interior y exterior de México, además para actuar contra generadores de violencia e integrantes del crimen organizado. La información militar da cuenta de reuniones –capacitación e intercambio– desde el segundo trimestre de 2022.
En esa fecha, se encontraron cinco integrantes de la Sección Segunda (S-2) de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), cinco de la Unidad de Inteligencia Naval (UIN) y 10 del Comando Norte (CDN) en Colorado Springs, Estados Unidos [visita de líderes clave (KLE) 2022-1].
El año pasado, se realizaron 21 reuniones de intercambio entre expertos y, para este año, están por iniciar cinco, durante el primero, segundo y tercer trimestre. Las cesiones serán tanto en Estados Unidos como en México. Los participantes, personal altamente calificado del CDN, la S-2 y la UIN, asienta el plan militar.
El Comando Norte se encuentra localizado en Peterson AFB, Colorado Springs. El área de responsabilidad del USNORTHCOM incluye las vías de acceso aéreo, terrestre y marítimas y abarca los Estados Unidos continentales, Canadá, México y las aguas hasta aproximadamente 500 millas náuticas.
Además, el Golfo de México y los estrechos de la Florida. Este se consolida bajo un comando unificado las misiones existentes que fueron ejecutadas previamente por otras organizaciones del Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Esto provee unidad de comando, lo cual es crítico para realizar la misión.
La misión de USNORTHCOM apoyo a la población civil incluye operaciones de auxilio que ocurren durante desastres domésticos como incendios, huracanes, inundaciones y terremotos. De igual forma, operaciones contra el narcotráfico y el manejo de consecuencias de eventos de terrorismo que empleen armas de destrucción masiva.
El comando provee apoyo a la agencia principal cuando sea asignada la tarea por el Departamento de Defensa. Debido al Acta Posse Comitatus, las fuerzas militares pueden proveer apoyo civil, pero no pueden implicarse directamente en el orden público, explica el sitio oficial del Comando Norte de Estados Unidos.
Este año, el primer encuentro será virtual con la partición de 17 expertos (6-Sedena, 6-UIN y 5-CDN). Versará sobre planificación y desarrollo de capacidades.
En el mismo trimestre, se conectarán los 17 expertos para “iniciar la planificación y discusión de inteligencia Geoespacial (GEOINT) sobre RPAS (Remotely Piloted Aircraft System, que se traduce como Sistema de Aeronaves tripuladas por control remoto) clase MALE (drones altitud media y gran autonomía); se elaborará un estudio de viabilidad y soporte, se describirán los requerimientos y se ayudará a desarrollar la capacidad de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR).
Con toda la información teórica y de gabinete “intercambio de expertos (SMEE); capacidades de operación de ISR 2023-03, el tercer encuentro se desarrollará en la Ciudad de México entre los mismo participantes.
Para cerrar la instrucción en el segundo trimestre de 2023 habrá otro acercamiento en la Ciudad de México. Esta será una actividad, presencial, que incluirá discusiones sobre el establecimiento de procedimientos de operaciones del ISR compartidos, requisitos de acumulación y prácticas de operación de dirección, e identificar oportunidades para ejercer las capacidades del ISR.
En el segundo y tercer trimestre de este 2023, el personal de la Sección Segunda de Inteligencia Militar y de la Unidad de Inteligencia Naval visitarán el Centro de Operaciones (PED) en Estados Unidos.
Esta vez los expertos observarán operaciones PED y cómo apoyan los requisitos operacionales y de nivel estratégico del ISR y aprender las prácticas óptimas para la implementación potencial a la doctrina de México.
En 2022 se desarrollaron 21 encuentros, once en Colorado Springs; Miami y Crestview, Florida, y uno en Washington DC. Otro conclave se desarrolló en Centroamérica durante el tercer trimestre del año.
En todos los encuentros se abordaron temas de inteligencia, análisis táctico de información, amenazas relevantes para la Defensa Nacional, capacitación de pilotos y operadores de sensores de misión ISR Aerotransportada.
El experto en seguridad y ex director de la Escuela Nacional de Inteligencia ante el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Jorge Retana Yarto, durante una entrevista concedida a Contralínea, destacó la importancia de hacer modificaciones constitucionales para contar con un marco jurídico constitucional, tener los instrumentos legales idóneos la Ley de Inteligencia y de un Sistema Nacional de Inteligencia. Además, propone cambiar el enfoque sobre la seguridad pública para combatir al crimen organizado.
Destaca que en el operativo para detener a Ovidio Guzmán López se avanzó sustancialmente en correlación al operativo fallido anterior (17 de octubre de 2019) en que se le trató de detener en Culiacán, Sinaloa.
Comentó que “fuimos testigos, en ese momento de una gran descoordinación”. Se trató de detener a Ovidio Guzmán sin una orden de aprehensión y con alrededor de 30 efectivos, cuando en comentarios de personal militar, se indicaba que: esta operación demandaría al menos 500 elementos, además de planeación logística.
Ahora, expresó, se da muestra “desde mi punto de vista, de un modelo exitoso de la aprehensión de un objetivo de alto nivel, de alto impacto”. Explicó que se puso en marcha un plan para la captura del objetivo; es decir, un Plan de carácter operativo y, después un Plan de Defensa. “Estas dos cuestiones articuladas dieron como resultado el resultado la detención de un objetivo de alto nivel con un costó mínimo”.
Advirtió que puede haber todavía reacciones, pero aunque pareciera circunstancial, al habérsele identificado dentro de una caravana de camionetas en Jesús María, Sinaloa, lo que está claro es “un trabajo de inteligencia de seis meses”.
En la operación se pueden identificar tres cuestiones fundamentales, a partir de técnicas tácticas; uno, la penetración en organizaciones y criminales; dos, vigilancia permanente en donde el objetivo se mueve y, tres, la operación encubierta de los agentes especiales, claro con los reportes de inteligencia, un Plan de Defensa.
Añade que en ese plan se establecieron círculos de seguridad, para evitar –como la vez anterior– que los elementos que resistieron y trataron de rescatar a Ovidio se posicionaran de la zona y de unidades habitacionales militares. Esta vez se estableció junto con el Plan Operativo, que consistió en la generación de anillos de seguridad en donde se dio protección a la gente y los militares que participaron en la operación.
También, comentó, hubo una coordinación interinstitucional de las distintas agencias del gobierno, “todas actuaron al unísono”.
Hubo una concentración de fuerza operativa y de inteligencia superior que aseguró el éxito. Al mismo tiempo, se alertó a la población para que no saliera a las calles y como se analizaron cada uno de los factores en juego, el resultado fue un operativo exitosos, con un bajísimo costo, junto con las condiciones propicias para una retirada del escenario de conflicto, traer a Ovidio Guzmán a la Ciudad de México para presentarlo ante la autoridad competente.
El experto en seguridad nacional indicó que por el Plan Operativo y de Inteligencia se pudo colocar armamento estratégico meses antes por vía terrestre y marítima en la zona, “se tenían armado todo el dispositivo. Fue una operación que da muestra de la capacidad estratégica y de inteligencia”, establece el doctor Retana Yarto.
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