A un mes del confinamiento por la pandemia de Covid-19, la Red Nacional de Refugios (RNR) reportó un incremento del 60 por ciento de denuncias por violencia de género. Tan sólo en marzo se registraron 163 delitos sexuales diarios, ello ha posicionado ese mes como uno de los más violentos para las mujeres desde 2015, documentó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional De Seguridad Pública (SESNSP).
Pareciera que fue ayer cuando un 8 de marzo las calles fueron tomadas por miles mujeres para exigir un alto a la violencia. Sin embargo, estos reclamos no están siendo atendidos, aseguró la RNR. Según cifras del SESNSP, los feminicidios también siguen al alza, incrementando un 6.8 por ciento respecto a 2019, es decir, han pasado de 311 a 332 homicidios.
Asimismo en marzo, el acoso aumentó un 92.2 por ciento; el hostigamiento sexual, 62.9 por ciento; abuso sexual, 25.6 por ciento; y violación, 14.6 por ciento. De éstos, el abuso sexual es el que tiene mayor recurrencia, con un promedio diario de 81.3 carpetas de investigación.
La Red Nacional de Refugios criticó la respuesta insuficiente del gobierno ante la crisis de violencia en el país en especialmente hacia las mujeres, ya que no se han tomado medidas contundentes para disminuir su impacto durante la política de confinamiento. La asociación civil indicó que en este contexto del distanciamiento social que los casos de violencia familiar, delitos sexuales e incluso feminicidios pueden exponenciarse.
A razón de lo anterior, la Red Nacional recomendó formular una política focalizada en la reducción y prevención de los homicidios, atendiendo los patrones especiales de las zonas de concentración de violencia; garantizar el cumplimiento de las órdenes de protección y las medidas precautorias para las mujeres violentadas con anterioridad, e identificar factores de riesgo y conductas vinculadas con la violencia de género, a través de mecanismos de justicia cívica para prevenir y evitar su escalamiento.
Finalmente, la RNR propuso generar espacios donde las mujeres víctimas puedan refugiarse y evitar el contacto con sus agresores; por ello, sugirió el fortalecimiento económico y apoyo con personal capacitado en los refugios para mujeres.