El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) advierte que los discursos de odio han encontrado una vía para reproducirse masivamente: el internet. Señala que las manifestaciones de odio están presentes en las relaciones cibernéticas y no sólo se ocurren en las relaciones físicas.
Este tipo de discurso es concebido como “una línea constante que puede detonarse a partir de un prejuicio o una idea estereotipada de las concepciones de las personas”, explica en entrevista con Contralínea Tania Ramírez, directora general adjunta de vinculación, cultura y educación del Conapred.
Tania Ramírez, explica que los prejuicios pueden materializarse en tres niveles: “un primer momento en una expresión, como puede ser una palabra”. En segundo lugar, está el discurso de odio, que “es un poco más articulado con ideas aparentemente discriminatorias”. Mientras que en el tercer nivel se encuentran las narrativas de odio que “son construcciones más complejas enraizadas históricamente”.
Al respecto de los tratos discriminatorios en las redes, comenta que éstas “son una expresión de las formas de convivencia de la sociedad y una vez que se destacan ciertas coyunturas, los prejuicios salen a la luz”.
Por su parte, Julio César Horta Gomez, comunicólogo por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialista en semiología, puntualiza que “los discursos de odio, entendidos como una forma de segregación, ocurren porque son una forma de socialización inherente a lo humano”. Explica que el lenguaje refuerza la necesidad de “establecer diferencias” entre seres humanos.
Con el fin de combatir el discurso de odio, el Conapred lleva a cabo el campamento “Narrativas sin odio, juventudes y transformación social”, del 16 al 20 de julio del presente año.
Jordana González