El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, dijo que el pueblo detendrá en México cualquier intento de golpe en contra de su gobierno democráticamente electo.
“Sí, el pueblo es mucha pieza y sólo el pueblo puede salvar al pueblo”, respondió el mandatario ante una pregunta de Contralínea acerca de si el pueblo bastará para detener el intento de golpe blando que ensayan empresarios, expresidentes y la élite intelectual. “Esa es una de las lecciones de política más importantes, y también dolorosas, que nos dejó el caso de Francisco I. Madero”. Explicó que en aquel entonces fueron capaces de crear un ambiente propicio porque Madero se alejó del pueblo.
“Esa lección ya la aprendimos; puede repetirse la estrategia de que se unan todos. Nada más que nosotros hemos aprendido a estar cerca siempre del pueblo, atendiendo al pueblo, recogiendo sus sentimientos y ayudando al pueblo. Eso hace la diferencia.”
Sin embargo, señaló que en la mentalidad conservadora, reaccionaria, eso no se alcanza a entender, pues para ese tipo de políticos el pueblo no existe. “Y por eso su enojo, su coraje, su rabia, de que no les funcionan sus estrategias por más lodo que tiran, por más que calumnien, por más que difamen”.
Argumentó que hoy el pueblo sabe que son sus tiempos. “Ahora es distinto, ahora el pueblo es primero y el pueblo es muy inteligente, muy sensible. No es como piensan los conservadores. Opinan con cierta frecuencia que el pueblo es malagradecido. No. Hay muchos ejemplos”.
Se refirió al caso de Bolivia, donde luego de un golpe de Estado en noviembre de 2019, con linchamientos mediáticos y el apoyo de organismos internacionales, se buscó legalizar y legitimar el nuevo régimen. “Y el pueblo de Bolivia, los más humildes, los indígenas, callados, en un ambiente hostil, votan [en octubre de 2020] por ellos mismos. No votaron por la oligarquía, votaron por el pueblo”.
Durante su conferencia de prensa, el titular del Poder Ejecutivo rechazó que los aparatos de inteligencia de su gobierno den seguimiento a la estrategia de golpe blando en México. “El equipo de inteligencia del Estado mexicano está destinado a otras cosas, ya no es como antes, que se utilizaba al Cisen [entonces Centro de Investigación y Seguridad Nacional] o aparatos del Estado para perseguir y espiar a opositores. Nosotros padecimos eso”. Recordó incluso el seguimiento del que él mismo fue objeto por parte de la Dirección Federal de Seguridad cuando trabajaba en Tabasco.
Señaló que su gobierno tiene como consigna “no hacer espionaje, no limitar la libertad de expresión, no censurar nada. Lo que tendrían que hacer nuestros adversarios es entender que es una nueva realidad y que no se puede poner vino nuevo en botellas viejas. Que aunque ellos piensen que sus estrategias o su pensamiento es lo predominante, no es así. Ya cambiaron las cosas. Hay un pueblo muy consciente, muy politizado, muy despierto. Me quito el sombrero frente al pueblo”.
Dijo que, además, los medios de comunicación ya no tienen el monopolio de la información. El internet significó una revolución que todavía no internalizan los conservadores. “Imagínense que haya 50 medios de información supuestamente nacionales”, entre periódicos, estaciones de radio y televisoras. Pero hay 50 millones de personas que tienen acceso al internet. Por ello, ni con la contratación de bots pueden manipular la información que circula en las redes sociales.
“Es lo que ellos [los conservadores] tiene que revisar para no seguir cometiendo errores. Y otra recomendación respetuosa: que no se enojen, que no les gane la rabia, que se serenen, porque se ponen coléricos, se obnubilan; no es para tanto: tranquilos, somos todos mexicanos. Si hay democracia y le tenemos respeto al pueblo, vamos a dejarle a los mexicanos que decidan, y vamos a hacer las cosas en paz y que prevalezca el amor al prójimo y no odiar a nadie.”
