Proveedores del gobierno y empresarios que figuran en la lista de los 300 deudores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) –entre los que destaca el expresidente Vicente Fox Quesada– han empezado a armar su defensa legal para evitar la cárcel. En total, las deudas con el fisco ascienden a 7 mil 44 millones de pesos.
Fuentes consultadas por Contralínea aseguran que han fallado todos los intentos de negociación directa y acercamiento que han buscado los empresarios, vía funcionarios y gestores, porque hasta ahora el gobierno federal se ha mantenido en seguir los procedimientos legales y no ha aceptado pactar con ellos tras bambalinas.
Por ello, entre los 300 morosos crece el temor de que les sean fincados cargos por evasión fiscal que ameritan prisión, y ya hacen fila ante prestigiosos despachos de abogados fiscalistas para tratar de evadir la aplicación de la justicia o, en su defecto, establecer sólidas defensas jurídicas que les causen el menor daño posible.