I. Con pruebas, documentación e información veraz y contrastada, el presidencialismo de Alemán a Peña (1946-2018), hundidos sus tentáculos en el porfiriato (1876-1910), se ha caracterizado por la corrupción (el despojo-robo del dinero y patrimonio de la nación), de la pandilla de ladrones que con ellos arriban a los poderes del Estado: presidencias municipales, gubernaturas y el poder Ejecutivo Federal que controla, directa o indirectamente, los poderes Legislativos y Judiciales y los reúne inconstitucionalmente en una sola persona que permite su enriquecimiento ilegal. Así, el régimen es integrado por rateros a los que encerramos en el concepto político-jurídico de: corrupción; término que ha transitado más a una característica que a un insulto o imputación penalmente sancionada, incluso como proceso de juicio político ante el Congreso, para que la Cámara de Diputados sea la fiscalía acusadora y el Senado órgano juzgador que dicte sentencia. Sobre este tema, el reportero y escritor Jenaro Villamil nos ofrece los cinco capítulos de su periodismo de investigación Cleptocracia, el nuevo modelo de la corrupción: “El origen: El ascenso de la tecnocracia”; “Las disputas de la tecnocracia en la sucesión”; “La república electoral de los ladrones”; “Peña Nieto es la corrupción: la línea de los escándalos”; “Los goberladrones”, y la “Operación Zafiro”.
II. En ellos desmenuza la podredumbre del régimen peñista-priísta y las complicidades con sus funcionarios mexiquenses: Videgaray, Ruiz Esparza, Nuño, Rosario Robles, Humberto Castillejos, Navarrete, Korenfeld, Baz Baz y un largo etcétera. Quienes bucean en el excremento de la cleptocracia peñista buscando cómo fugarse con sus disfraces de salinistas, zedillistas, duartistas, foxistas, calderonistas; todos más de lo mismo a la hora de ser cacos, saqueadores, carteristas, ladrones, rateros. Son más de 30 historias en donde Villamil pescó a los grandes del PRIAN que se turnaron en el poder presidencial y las gubernaturas; comportándose como capos, peores que los varones de las drogas. Es un texto que nos pone al tanto de esos dráculas de la absoluta corrupción que han empobrecido a los 55 millones de pobres, los 30 millones de desempleados, los 10 millones de indígenas, etcétera, como consecuencia de la ratería elitista del poder gubernamental. Es un documento periodístico para leer la dramática realidad de los robos sexenales de 1976 hasta casi el final sexenal de Peña, cuando la cleptocracia con sus robos y privatizaciones (otra modalidad de robar) han saqueado al pueblo, a tal grado que de no haber elecciones libres y democráticas, el volcán del encabronamiento social estalla.
III. No hay más que veracidad de hechos en la investigación de Villamil, sistematizando lo que hicieron los tecnócratas del neoliberalismo económico para enmascarar al capitalismo salvaje del liberalismo económico elogiado por los Vargas Llosa y Krauze. En el centro de esas raterías, Peña, su cártel de Atlacomulco y su cueva en Los Pinos. 1988-2018 es el período que el autor analiza: Salinas, Zedillo, Fox, Calderón, Peña; y los 11 desgobernadores del PRI-rateros-PAN que hundieron a México y a sus más de 100 millones de mexicanos que sobreviven en todas las desgracias. Un libro de consulta permanente y para investigaciones posteriores sobre cómo un país ha sido lastrado por rateros; llevándonos paso a paso por ese enredo de corrupciones que ha de servir a estudiantes, abogados y periodistas, para seguir penetrando ese mal que ha dañado profundamente a los mexicanos, sin auténticos representantes que los defiendan. Son páginas de biografías de ladrones-funcionarios que son exhibidos con datos, hechos y nombres como Peña “N”, Montiel “N”, Videgaray “N”, Salinas “N” y los demás “N” que han robado y siguen robando con la impunidad de hacer de los poderes públicos la fuente de su enriquecimiento.
Ficha bibliográfica:
Autor: Jenaro Villamil
Título: Cleptocracia
Editorial: Grijalbo, 2018
Álvaro Cepeda Neri
[MISCELÁNEO][EX LIBRIS]