Las cartas de Maquiavelo

Las cartas de Maquiavelo

I. Parteaguas histórico de los gobiernos: autocracias y republicanismo democrático, en el contexto jurídico del Estado (sobre el que nadie como Hans Kelsen postuló como una estructura constitucional en calidad de núcleo de sus leyes reglamentarias y toda la legislación inherente a él, en su Teoría General del Estado), fue el diplomático, funcionario, filósofo político y escritor italiano, considerado padre de la ciencia política moderna: Nicolás Bernardo Maquiavelo (1469-1527). El cerebro universal que estudió, investigó y analizó lo que son las modalidades de los gobiernos-gobernantes en todas sus manifestaciones autocráticas: monarquías, principados y toda clase de despotismos. Los que fueron retratados en todo su antirrepublicanismo y el poder absoluto que ostentaban en su ensayo El príncipe; a cuyas páginas recurrieron y hasta la fecha lo hacen los gobernantes que se asumen como “el Estado soy yo” que sintetizó Luis XIV, y abortó la Revolución que se venía gestando en las vísperas de 1789. Abordando también con gran precisión la otra cara de ese Jano político: las repúblicas de raíces democráticas; las cuales fueron ampliamente puestas a la luz histórica en su opus magna: Discursos sobre la primera década de Tito Livio.

II. Caminando entre las laberínticas calles-callejuelas de Florencia, Maquiavelo se cruza con Miguel Ángel, Savonarola, algunos papas, Leonardo da Vinci, etcétera. Nacido San Casciano in Val di Pesa, a unos 15 kilómetros de Florencia, el 3 de mayo de 1469, vive y sirve a la República; motivo por el cual es perseguido por el despotismo de los Medici. Y en su exilio dentro de su Florencia, a partir de 1513, el Maquiavelo que asegura solamente conocer las cosas del Estado y conversar con los autores de los tratados sobre la política, inicia sus creaciones formidables que giran precisamente entre Los discursos sobre la primera década de Tito Livio y El príncipe. Las cuales están unidas por un factor común: sus cartas escritas entre 1512 y 1527, que son, con las obras citadas, el tríptico al que hay que volver una y otra vez para el conocimiento de la praxis política; es decir; la forma como se experimentó en la época de Maquiavelo. Y el conocimiento de la teoría política. Y de la naturaleza de los políticos que oscilan entre ejercer el poder absoluto y el poder democrático; es decir, el camino entre la autocracia y el republicanismo.

III. Maquiavelo es, para antes y después de su obra, factor común para las teorías políticas y para explicarnos, con base a éstas, los regímenes y sistemas que han imperado en la experiencia histórica. Por eso también su correspondencia es clave. Pues al leerla, estudiarla y releerla, encontramos sus profundas reflexiones que van de las autocracias a las democracias, del despotismo al republicanismo, del golpismo a la disputa electoral. Su epistolario se complementa, como nexo, con las dos grandiosas y lúcidas obras antes mencionadas. Por lo que hay que ir a toda su creación para comprender su teoría del gobierno y el conocimiento sobre la naturaleza de los gobernantes y de los pueblos. “Solamente sé de las cosas del Estado”; aconsejando ser amigo del pueblo, antes que ser odiado por él. Y hacer como Maquiavelo decía de sí mismo: entrar a la biblioteca y consultar a los grandes autores y hablar con ellos sin temor y pedirles que nos expliquen sus teorías. Y esto solamente yendo a las páginas de la historia política sobre los hombros de este pensador, que en sus cartas nos dejó su perspectiva histórica para mirar con los ojos del conocimiento la política, y discriminar a los políticos de los seudopolíticos. Así: legendum: debe leerse.

Ficha bibliográfica:

Autor:   Nicolás Maquiavelo

Título:                   Epistolario: 1512-1547

Editorial:              Fondo de  Cultura  Económica

Título:   Cartas Privadas de Nicolás Maquiavelo

Editorial:              Eudeba

Álvaro Cepeda Neri

[MISCELÁNEO][EX LIBRIS]