Después de permanecer 56 días en huelga de hambre, Mario González decidió terminarla. En un mensaje leído ante los medios por su compañera Nuria Ramírez, el joven detenido el pasado 2 de octubre explica sus razones.
“Mi estado de salud se encuentra en un punto crítico y no les daré el gusto de dejarme morir aquí. Considero que he hecho mi mayor esfuerzo y ocupado mi única herramienta de protesta en esta condición de preso”, expresa.
Agrega: “Confió en que pronto saldré libre para poder seguir luchando juntos y juntas por ese mundo nuevo que llevamos dentro de nuestros corazones”.
El médico Sebastián Ponce Mendoza explicó que durante la huelga de hambre, Mario perdió entre 16 y 18 kilos de peso. “En visitas anteriores le explicamos que la huelga podría dejarle secuelas graves permanentes en su salud”.
“Estamos preocupados porque él aún no está convencido de dejar la huelga y podría retomarla. Por el momento lleva una dieta blanda para que poco a poco su sistema gastrointestinal funcione bien”, mencionó Ponce Mendoza.
Mario González fue detenido antes de la marcha conmemorativa de la matanza de Tlatelolco. Es acusado de ataques a la paz pública. Su audiencia ha sido pospuesta en dos ocasiones debido a que los policías que lo acusan no se han presentado (Contralínea 363).
Lizbeth Lugo, abogada de Mario, señala que tampoco se le ha comprobado su peligrosidad social a la que la juez –Marcela Ángeles Arrieta– apela para no dejar que continúe su proceso jurídico en libertad. Tampoco se han presentado los videos de las cámaras del Gobierno del Distrito Federal, en los cuales, Mario supuestamente ataca a la paz pública.
La próxima audiencia de Mario será el próximo 10 de diciembre en el Juzgado 19 de Delitos No Graves. Aún quedan presos Abraham Cortés, José Alejandro Bautista, Adrian Gutiérrez, Daniel Palacios, Ilia Adad Infante, Salvador Reyes y Víctor Efrén Espino, por los sucesos del 2 de octubre pasado.