El pensamiento político de Hans Kelsen

Sara Lagi, investigadora, profesora y escritora (graduada en la universidad de Florencia… ¡la Florencia de Nicolás Maquiavelo, el creador de la teoría política moderna republicana y quien diseccionó el binomio democracia-autocracia!), ha redactado con maestría y análisis crítico el magnífico libro El Pensamiento Político de Hans Kelsen: 1911-1920: Los Orígenes de la Esencia y Valor de la Democracia.

La política a partir de la teoría para la praxis política

No se nace político. Se hace político a partir del aprendizaje en la historia de las teorías políticas y de lo que han sido ambas en el presente a partir de Atenas-Esparta (para esto nada como el texto de Luciano Canfora, El mundo de Atenas; editorial Anagrama; acompañado de Norberto Bobbio, Teoría General de la Política, editorial Trotta). Lo que ha pasado es que en el escenario de la política de México y el mundo, quienes se presentan como políticos pasaron por alguna licenciatura, quizá hasta universitaria; o en cursos al vapor sólo para obtener un certificado. Pero no se han dedicado a continuar estudiando a los teóricos de la materia directamente y no sólo en historiadores de política. Y que los hay, sirviendo de introducción a los teóricos y actores de la política.

El Premio de Periodismo a Juan Villoro y la enésima embestida a Sanjuana Martínez

Al recibir el Decimocuarto Premio de Periodismo, en la capital de España (Armando G Tejeda, La Jornada, 9 de abril de 2016), el escritor y periodista Juan Villoro cumplió con su deber de ética democrática, al criticar las condiciones que los periodistas mexicanos padecen en México. Fue un discurso de enorme valor político en los momentos en que nuestro país es uno de los más peligrosos para ejercer el periodismo, ya que –recordó el escritor– 120 informadores han sido asesinados en los últimos 25 años; y recientemente en Veracruz 15 periodistas han sido víctimas de homicidio y más de 300 han sufrido agresiones, en el contexto de la espantosa inseguridad que afecta a toda la población con muertos, secuestrados y desaparecidos.

Manuel Aguilera Gómez y su conflicto, esperanza y frustración petrolera

Es un libro de siete ensayos político-económicos que van subiendo de tono crítico. Alcanza su clímax a partir del capítulo cinco, rematando su análisis con el tránsito del Petróleos Mexicanos (Pemex) de la expropiación de 1938 a la contraexpropiación de 2014; o sea, de la grandeza de un Lázaro Cárdenas al presidente del montón: Peña Nieto. No son las dos caras de la misma moneda: la del mexiquense en el “basurero de la democracia que está lleno de vidas de aspirantes a líderes” (John Keegan, La máscara del mando). La cardenista asida al pueblo, al Estado-nación, al imperio de la ley constitucional. De un Pemex para garantizar la soberanía energética, la independencia económica y la intervención en el mercado para relativizar los abusos del capitalismo, a un expemex privatizado que abre al país a todos los riesgos de la globalización del neoliberalismo económico, y como botín de los capitalistas que ya son el 1 por ciento de la población mundial (Joseph B Stiglits, La gran brecha). Valga lo anterior como prólogo a la reseña del libro de Manuel Aguilera Gómez: El petróleo mexicano: conflicto, esperanza y frustración.