En una carta dirigida a la comunidad del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), el doctor Agustín Escobar Latapí –director de la institución– asume la responsabilidad de la reciente contratación de la priísta Dulce María Sauri Riancho como investigadora de la Unidad Peninsular.
En días recientes, dicho contrato causó preocupación y molestia al interior de la institución académica, pues algunos investigadores consideran que se habrían violado los reglamentos; además de que, señalan, las oportunidades para ingresar a una plaza similar deben darse a los jóvenes y no a personas mayores a los 65 años de edad.
Ante la inconformidad, el doctor Escobar señala en la misiva: “Asumo que la iniciativa de esta contratación es mía, y tiene objetivos y razones estratégicas. El contexto presupuestal y político de la ciencia en México ha cambiado. No podremos ser fuertes si dependemos sólo del presupuesto federal aprobado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. En el futuro cercano, el crecimiento, la actividad científica y el impacto del CIESAS dependerán crucialmente de las buenas relaciones que establezcamos […]”.
En la carta, con fecha del 21 de marzo, el director del CIESAS agrega: “la mudanza al parque científico y tecnológico de Yucatán precisamente nos lleva a un futuro de este tipo. La contratación de una investigadora que facilite las redes, contactos y proyectos es una decisión estratégica que cabe dentro de mis facultades. La tomo sin ninguna presión directa ni indirecta, sino basado en mi apreciación de lo que es necesario para CIESAS”.
El académico va más allá ante las críticas internas: “No sólo es conveniente contratar a jóvenes con gran potencial pero escasa experiencia. Las instituciones que enfrentarán mejor los años por venir serán las que cuenten con la diversidad humana que hace posible establecer y afianzar alianzas, operar proyectos con investigadores jóvenes y expertos, administrarlos con transparencia y llegar a buen término en todos los casos”.
El doctor Escobar señala, además, que Sauri Riancho se tituló del doctorado en historia el año pasado con un promedio máximo (“el mejor de la historia de ese posgrado”). Según el académico, aunque la priísta se acaba prácticamente de titular, “ya cuenta con publicaciones analíticas propias de su carrera política previa. Ha presentado diversas ponencias y su capacidad está fuera de toda duda”.
Para el director del CIESAS, “sugerir que se violó alguna norma o procedimiento, o que hay algo opaco o contrario a los intereses del CIESAS, es incorrecto”. No obstante, parte de la comunidad continúa indignada por esta contratación que, dicen, abre la puerta a la mercantilización de la institución académica.