Luego de conocerse un video en el que se observa que un militar disparó a un civil en la cabeza cuando éste ya estaba sometido, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dice que, “bajo ninguna circunstancia, pueden justificarse conductas contrarias a la Ley y a los Derechos Humanos”. La dependencia está de acuerdo en que, “de acreditarse” la ejecución extrajudicial, debe sancionarse “con todo rigor”.

Al menos dos videos captados con cámaras distintas comenzaron a circular en el portal de Youtube, y luego en otras redes sociales, de las balaceras sostenidas entre efectivos del Ejército Mexicano y supuestos integrantes de la delincuencia organizada dedicados al robo de combustibles. Los hechos ocurrieron en El Palmarito Tochoapan, Puebla, la noche del 3 de mayo pasado, y en ellos perdieron la vida cuatro elementos militares y seis civiles.

Los hechos reportados por la Sedena mediante boletines de prensa de los días 3 y 4 de mayo podrían resultar inexactos, según lo que puede observarse en los videos captados por cámaras de seguridad de un domicilio cercano al lugar donde ocurrieron los enfrentamientos. En una de las grabaciones se aprecia que un soldado disparó a un civil cuando éste se encontraba bocabajo en el suelo. Los demás militares parecen no sorprenderse del hecho.

Ante la divulgación de los videos, la Dirección General de Comunicación Social de la Sedena señala que el hecho “debe ser esclarecido fehacientemente por el Ministerio Público de la Federación que lleva la investigación de los hechos, para determinar con precisión si corresponde al lugar y evento de referencia, así como si es auténtico o editado y, en su caso, deslindar las responsabilidades que correspondan”.

En el comunicado, la Secretaría señala que colaborará “en todo lo necesario” con la Procuraduría General de la República. Además, informa que, por su parte, la Fiscalía General de Justicia Militar “realizará las investigaciones por lo que hace a los delitos del orden militar que pudieran haberse cometido”.

Zósimo Camacho