A pesar de todos sus problemas, la Ciudad de México es la única que, en sus finanzas, puede presumir de un fondo de estabilización de sus ingresos por más de 4,000 millones de pesos. Este fondo ha sido una de las obsesiones del titular de la Secretaría de Finanzas del gobierno capitalino, Édgar Amador. Fue en 2012 cuando, como parte de un ejercicio presupuestal de innovación y rendición de cuentas, Amador Zamora reportó que el Fondo de Estabilización de Ingresos contaba ya con recursos por 3,000 millones de pesos. El fondo, lejos de desaparecer, aumentó 33 por ciento. Una buena noticia que revela la salud de las finanzas en la Ciudad de México en donde sus habitantes podrían pensar que estos ingresos son resultado de las nuevas multas y de la aplicación del reglamente de tránsito que tan inconformes nos tiene. La noticia es que por concepto de multas el gobierno de Miguel Mancera no obtiene grandes ingresos y por ello buscó mecanismos para que la vigilancia de la seguridad vial no representara una carga económica o la distracción de recursos para otros temas. Resulta que el principal ingreso en la Ciudad de México se obtiene por el cobro del predial porque en esta entidad lejos de renunciar al costo político de recaudar este impuesto a la propiedad, Mancera y su equipo financiero se han dado a la tarea de buscar esquemas y caminos para facilitar su pago. ¿Qué pasaría si en cada ciudad del país se interpretara de la misma forma? Seguramente aumentaría la recaudación y los recursos para proyectos educativos y de salud. Pero el costo político es alto y muchos gobernantes prefieren buscar las partidas presupuestales que vienen de la Federación. Bueno, les comento además que los índices de cumplimiento de los capitalinos en materia de contribuciones son de los más altos del país. Así, el gobierno de la Ciudad de México recauda el 30% del predial que se cobra a nivel nacional. Y confirmado, por multas de tránsito el gobierno de Mancera no obtiene ni el 1% de los ingresos. Palomita para los habitantes de la Ciudad de México.
Confrontación entre IFT y concesionarios ¿Cortina de humo?
Los concesionarios de la radio y la televisión, sobre todo los que operan negocios en este sector en el interior del país, mantienen – ante el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) – las propuesta de revisar las condiciones bajo las cuales se pretende establecer la nueva competencia y la operación de estos recursos.
Al organismo responsable de regular la competencia en este sector, los concesionarios de la radio le recuerdan que en mucha ciudades del país la industria de la radio genera miles de fuentes de empleo y bienestar regional. Por ello, la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) pide replantear las condiciones en las que se establecen las contraprestaciones económicas porque – de no modificarse – mermarían sus niveles de rentabilidad y, por supuesto, la generación de empleos. Los concesionarios de estaciones de radio que forman parte de la CIRT han iniciado una campaña informativa a través de spots radiofónicos para hacerle llegar este mensaje al IFT. Son muchos frentes los que mantiene abierto este organismo que encabeza Gabriel Contreras, en donde se buscará – mediante argumentos técnicos – hacer valer su decisión de refrendar la concesiones después del pago de contraprestaciones. El enfrentamiento entre el IFT y la CIRT se presenta en el marco de la licitación de 257 frecuencias radiofónicas en la banda de AM y FM. Edgar Pereda, presidente de la CIRT, ha anunciado una batalla jurídica frente al IFT porque no está de acuerdo con las reglas establecidas por el organismo. El problema es el monto de las contraprestaciones, una condición que los concesionarios de este sector no estaban acostumbrados a incluir en sus planes de inversión.
Lo que es cierto es que en el reordenamiento del negocio radiofónico ( a pesar de que se trata de un sector muy relevante) se podría generar una cortina de humo cuando el sector de las telecomunicaciones (con gran penetración en la economía) espera la consolidación del sector de la telefonía inalámbrica y de la transmisión de datos y video. Algunos de los grupos de radiodifusores también tienen intereses en la industria de la televisión por cable, solos o en asociación. No es casual la jugada de tres bandas que busca cerrar el IFT. Lo relevante, sin embargo, es no distraer la atención del gran problema de concentración que aún se tiene en la telefonía inalámbrica.
AHMSA va por el mercado interno
Esa guerra por los mercados del acero obligó a que los principales inversionistas mexicanos decidieran vender sus empresas a grupos multinacionales. AHMSA, de Alonso Ancira, vendió activos pero no el control y acaba de concluir un largo periodo de suspensión de pagos. Ahora se prepara a pagar a la banca acreedora, sin olvidar la expansión de sus mercados internos. AHMSA, con más de 23,000 empleados, va por el mercado automotriz, por el ferrocarrilero y hasta por los barcos. En otras palabras, quiere su mercado interno, ese que otros competidores decidieron dejar a los jugadores extranjeros. ¿Podrá defender a sus clientes de los buenos precios de los asiáticos, justo en un momento en el que el proteccionismo no se observa muy bien en el ámbito internacional del comercio?
Una historia de crecimiento
Aunque la economía no exhibe su mejor momento y muchos analistas aseguran que el escenario de crecimiento se complicará, uno de los sectores que muestra buenos números y dinámica es el turismo.
No es casual, por ejemplo, que varios de los principales aeropuertos en el país exhiban signos crónicos de saturación. El de la Ciudad de México prácticamente se encuentra colapsado y los retrasos en los vuelos son un escena muy común. De acuerdo con los analistas de la casa de bolsa Finamex, en las cifras operativas mensuales más recientes publicadas por aeropuertos y aerolíneas mexicanas se aprecia que continúa una tendencia positiva para la demanda en el sector, impulsada en gran medida por el desempeño del segmento nacional. Este es el balance de los últimos meses, aunque el ritmo de crecimiento del tráfico de pasajeros comienza a desacelerarse respecto a 2015.
El dinamismo del tráfico en los aeropuertos es ya superior al 10%, una cifra sorprendente, tomando en cuenta que la economía, según las cifras oficiales, no superará el 3% de expansión. El tráfico internacional también está avanzando de una manera muy interesante, con variaciones anuales mayores al 5 por ciento. La única empresa que, según Finamex, no está reflejando esta dinámica es el Grupo Aeroportuario Centro Norte (OMA), en la que el factor ICA ha sido determinante. Llama la atención, sin embargo, que el análisis de Finamex revela que 2015 –para el turismo locales y los viajeros internacionales– fue un año de mucho mayor crecimiento. ¿Qué está sucediendo en este sector? ¿Concentración de la riqueza? ¿Dinámica empresarial en ciertas industrias? ¿Qué historia nos cuenta el sector turístico que no vemos reflejada en otras áreas del consumo?
Este fenómeno de expansión está beneficiando los títulos de acciones del sector de la aviación, de las operadores de aeropuertos en un momento clave para la economía.
El riesgo, sin embargo, es que la desaceleración a nivel mundial impacte durante los próximos años, este crecimiento interno del turismo, la industria de la aviación y el sector aeroportuario.
Claudia Villegas
Contralínea 497 / del 18 al 23 de Julio 2016