La producción agrícola de más de 1 millón de hectáreas a nivel mundial se encuentra en riesgo de pérdida a causa de la excesiva salinidad de los suelos, alertó la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Agregó que el cambio climático agrava la situación, porque la alta concentración de sales está afectando las propiedades del suelo y provoca la pérdida de fertilidad y el bajo rendimiento e imposibilidad de los cultivos agrícolas.
La FAO aseguró que se trata de un problema de rápido crecimiento para la agricultura que pone en peligro la seguridad alimentaria y la calidad de los cultivos.
Al respecto, el director general de la FAO, José Graziano da Silva, advirtió que “la degradación del suelo afecta la producción de alimentos, provoca hambre y malnutrición, aumenta la volatilidad de los precios alimentarios y fuerza al abandono de las tierras”.
La Organización informó que la salinidad de los suelos puede presentarse por diversas razones, entre ellas: “la mala gestión de las personas, el uso excesivo o inadecuado de fertilizantes, la deforestación, la subida del nivel del mar, una capa freática poco profunda que afecta a la zona de las raíces o a la filtración de agua de mar en las capas subterráneas que luego se utilizan para el riego”.
Por ello, indicó que para combatir este fenómeno se requiere una serie de herramientas que van desde tomar conciencia del problema hasta la adopción de prácticas de gestión sostenible del suelo mediante el impulso de la innovación tecnológica y de un mayor compromiso político.
El organismo llamó a fomentar medidas de prevención, coordinación “y adaptación de la salinidad en el contexto de la seguridad alimentaria, el cambio climático y la restauración de los ecosistemas”. Asimismo pidió “establecer conexiones entre los responsables políticos, los productores de alimentos, los científicos y profesionales” con el propósito de financiar un futuro sostenible, justo y verde para la humanidad.
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