La tarde de este 17 de noviembre, la comisionada del Inai, Julieta del Río se sumó a la decisión de renunciar a la tarjeta corporativa que se le asignó desde que tomó posesión del cargo, luego de que se desatara un escándalo por el presunto uso indebido de recursos públicos en el Instituto a través de esos plásticos.
La decisión se da un día después de que la presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, Blanca Lilia Ibarra, renunció a la tarjeta American Express con cargo al erario.
Las dos renuncias al manejo de presupuesto público por esa vía se da apenas cinco días de que Contralínea documentó que en agosto de 2014 el entonces comisionado del Inai, Óscar Guerra Ford, realizó tres cargos a la tarjeta corporativa del Instituto en un table dance clausurado en 2018 por trata de personas, en su modalidad de prostitución. Para mayo de 2016, el pleno del Inai decidió censurar esa información bajo el argumento de que quedaría expuesta la capacidad adquisitiva del comisionado, pues si bien se habían hecho 94 gastos personales con dinero público –entre ellos los del table dance–, este recurso se había restituido al Inai con el patrimonio particular.
Hasta antes de la publicación del reportaje de Contralínea, el Inai mantenía activas tarjetas corporativas para uso de los cuatro comisionados y el director de Asuntos Internacionales, bajo un esquema que les permitía gastar en asuntos personales el dinero del pueblo de México.
De acuerdo con lo documentado por este semanario, los gastos con cargo a esas tarjetas corporativas son “por comprobar”, motivo por el cual podrían estar incurriendo también en pagos de asuntos personales que nada tienen que ver con su función. Y es que aunque los gastos con cargo a esas tarjetas –es decir, al erario– deben sujetarse a todos los controles administrativos para que se garantice su uso correcto, los funcionarios tienen la canonjía de que cualquier gasto personal o que incumpla los requisitos de control lo reembolse en 10 días hábiles sin que se les abra investigación para descartar un posible peculado.
Hasta ahora, los comisionados Josefina Román Vergara y Adrián Alcalá Méndez aún no se pronuncian en torno a las tarjetas corporativas que manejan, por lo que aún seguirían utilizándolas.
Te puede interesar: Renuncia Guerra Ford al Inai; será investigado por gasto en ‘table dance’