El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, reiteró que el gobierno de México ha decidido hacer una “pausa” en la relación con el gobierno español. Advirtió que no se trata de una ruptura, sino de repensar la relación que han mantenido ambos Estados en los últimos años.
Aclaró que su gobierno es respetuoso del pueblo español y reconoce la “relación íntima” entre mexicanos y españoles. Pero es necesario que se ponga fin a una inercia que se estableció bajo los regímenes neoliberales, donde empresas españolas apoyadas por los poderes políticos de ambos países abusaron de México y del pueblo mexicano.
Explicó que hasta la fecha empresarios españoles como los de Iberdrola, Repsol y OHL ven a México “como tierra de conquista”. Recordó que estas empresas fueron las “consentidas” de los sucesivos gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Recordó que se les otorgaron contratos con base en el “influyentismo” y no en las capacidades de las empresas. Por el bien de los pueblos, argumentó, se debería hacer una pausa en las relaciones entre México y España. Deben tener claro que la situación en México ha cambiado y ya no pueden venir a saquear impunemente. “Deberían ofrecer hasta disculpas, porque hay una falta de respeto”.
Recordó cómo Iberdrola no sólo se benefició con contratos ventajosos, sino que incorporó en una de sus direcciones a quien fuera secretaria de Energía durante le sexenio de Felipe Calderón (Georgina Kessel) y al propio expresidente le dio un lugar en su cosejo de administración. Con ello tuvo a su alcance información provilegiada para seguir saqueando al país.
Explicó que estas empresas, con el favor de autoridades de México y de España, simularon participar en licitaciones públicas. En realidad, estos procesos estuvieron amañados porque existía la consigna de que estas emoresas debian “ganar” los concursos.
Te puede interesar: Kerry entiende las razones de la reforma eléctrica de México: AMLO