Que tan efectiva resulta ya la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), a cargo de Diana Bernal, que grandes empresas, incluyendo multinacionales, se encuentran ya en la lista de personas morales que esta entidad defiende frente al Servicio de Administración Tributaria (SAT), bajo la responsabilidad de Aristóteles Núñez.
Aunque en materia fiscal, no se acepta la mediación, la Prodecon se ha convertido en un defensor no judicial de los derechos de los contribuyentes y, al parecer, está ofreciendo buenos resultados.
En materia de devolución del impuesto al valor agregado (IVA), Diana Bernal –que también fue legisladora– obtuvo para una gran contribuyente una devolución por más de 7 mil millones de pesos. Así que las empresas –sobre todo las extranjeras– comienzan a confiar cada día más en la devolución de impuestos. La intermediación de la Prodecon, además, le ha dado transparencia a estas devoluciones del IVA que, en el pasado, tuvieron a litigantes como Diego Fernández de Cevallos buscando estas entregas de recursos.
Otra naviera obtuvo una devolución por impuestos en la compra de combustibles.
En este momento, además, Prodecon ha impuesto al menos 1 mil amparos en contra del envío de la contabilidad electrónica (balanza de comprobación) en forma mensual, lo que mantiene a muchos contribuyentes en incertidumbre jurídica.
Sin juicios fiscales
Antes de que la Prodecon iniciara sus operaciones en 2006, los contribuyentes no tenían otra opción que llevar a juicio sus casos e inconformidades frente al fisco. Esos procesos judiciales podían durar hasta cinco años. Al término, si el contribuyente perdía, los recargos se convertían en una verdadera lápida.
Ahora, la Prodecon, a través de una queja –un procedimiento expedito– ha resuelto grandes casos en un par de días.
Sin embargo, desde una “amable carta invitación” del SAT para revisar la situación fiscal de un contribuyente puede recibir asesoría por parte de la Prodecon. La población contribuyente en México presentó en 2015 más de 58 mil 988 quejas frente a las más de 40 facultades de fiscalización con las que cuentan las autoridades.
Conavi redimensiona vivienda popular
La política pública para el impulso a la vivienda se ha transformado en las últimas dos décadas. La actual directora general de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), Paloma Silva, ha sido partícipe de estos cambios desde la Sociedad Hipotecaria Federal, en la época de Javier Gavito.
Ahora, al frente de la Conavi, Silva –egresada del ITAM y experta en gestión de riesgos– es responsable de coordinar los esfuerzos de esta entidad del gobierno federal para canalizar financiamientos y subsidios para la vivienda popular. Los subsidios que otorga la Conavi pueden llegar a cubrir un monto hasta de 70 mil pesos. Los recursos que otorga la Conavi se dirigen a la población de escasos recursos y puede hacer la diferencia entre una familia que obtiene su primer patrimonio y una que debe compartir eternamente la vivienda con padres o hermanos.
Junto con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), la Conavi blinda el espíritu de la nueva política pública para el desarrollo de la vivienda popular. Como usted recuerda, fue a principios de esta administración que se modificaron los criterios, a través de la Sedatu, para aprobar reservas territoriales y, por supuesto, entregar subsidios. La decisión del gobierno de Enrique Peña Nieto paralizó las fábricas de casas que, hasta ese momento, habían impulsado dos administraciones panistas favoreciendo a compañías como Geo de la familia Gómez Mont.
Los criterios cambiaron y las megadesarrolladoras de vivienda que crecieron en los gobiernos panistas tuvieron que cambiar sus estructuras, costos y expectativas. A Paloma Silva le preguntamos si se trataba de un ajuste de cuentas luego de que la sombrilla panista protegió a estas compañías. La financiera nos respondió sin rodeos: “En lo absoluto. No se trata de un ajuste de cuentas”. Y agrega: el cambio de la política pública de vivienda era absolutamente necesario para alcanzar desarrollos integrales de vivienda en donde las familias puedan mejorar su calidad de vida, en donde los niños puedan jugar y, por supuesto, que ofrezca también alternativas de empleo, salud y esparcimiento.
Con un déficit de vivienda que todavía supera los 9 millones de casas-habitación, la Conavi tiene grandes retos en materia de entrega de subsidios y, por supuesto, de transparencia para consolidarse como una entidad apartidista, transexenal e institucional.
Su actual directora es una técnica de la economía y las finanzas, algunos la llamarían tecnócrata, cuyas decisiones responden a criterios estrictamente sociales y de política pública.
El déficit de vivienda todavía es muy grande. Además, se calcula que más de 1 millón de viviendas se perdieron como resultado de las políticas anteriores que privilegiaban la venta, el crédito y la entrega inmediata sin importar que se tratara de casas-habitación lejanas y sin servicios.
Claudia Villegas
[BLOQUE: OPINIÓN][SECCIÓN: IQ Financiero]
Contralínea 494 / del 27 de Junio al 02 de Julio 2016