La adquisición de pipas para transportar gasolina será a nombre de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y no de Petróleos Mexicanos (Pemex). Asimismo, serán elementos de esa secretaría los encargados de operarlas. Se trata de 500 pipas con capacidad de transportar 60 mil litros cada una o 1 mil con capacidad de 30 mil litros.
En conferencia de prensa celebrada esta mañana, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, dijo que así se podrá garantizar la distribución de 200 mil barriles diarios. Y, con ello, tener capacidad de respuesta cuando deba cerrarse algún ducto ante actos de sabotaje o robo del energético.
También informó que la vigilancia militar a los ductos será permanente e involucra ya a más de 10 mil efectivos, entre integrantes soldados, marinos y policías federales.
Para la compra de las pipas, nombró “una comisión que está trabajando con carácter de urgente”. En esta comisión participan Raquel Buenrostro, oficial mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público; Irma Eréndira Sandoval, secretaria de la Función Pública, y Graciela Márquez, secretaria de Economía.
“Ellas tres van a hacerse cargo de la adquisición de estas pipas. Ya iniciaron el proceso de consulta con fabricantes nacionales y extranjeros, ya se les va a informar en su momento.”
Estos vehículos serán parte del patrimonio de la Sedena. “Pronto, muy pronto, vamos a tener este equipo que va a pertenecer a la Secretaría de la Defensa, porque lo estamos concibiendo como un plan de emergencia para que no tengamos problemas de abasto de combustibles ante cualquier circunstancia”.
Por su parte, el general Luis Cresencio Sandoval, titular de la Sedena, detalló que de nueva cuenta efectivos castrenses evitaron un nuevo robo de combustible. Con ello, también se evitó el cierre del ducto que abastece a gasolina a, entre otras entidades, la Ciudad de México.
El avión King Air de la Fuerza Aérea Mexicana, que se mantiene en vuelo durante la noche para vigilar los ductos, detectó a las 2:42 de esta madrugada a un grupo de personas que se disponían a perforar un ducto. Los supuestos delincuentes contaban con 20 vehículos, entre ellos pipas, y mangueras.
El avión informó del hecho al centro coordinador y a un helicóptero que se encuentra en el área. Al percatarse de la presencia del helicóptero, los supuestos huachicoleros huyeron. Los hechos ocurrieron a 10 kilómetros al sureste de Tulancingo, Hidalgo, muy cercana a la población Ventoquipa.
“Esta acción, que se hizo de manera muy rápida, es el resultado de mantener la vigilancia las 24 horas por tierra y por aire, y con fuerzas de reacción helitransportadas.”
Zósimo Camacho