El abogado Juan Collado –preso en el Reclusorio Norte bajo acusaciones de presunta delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita– debería dejar de litigar en medios de comunicación y enfocarse en la reparación del daño que presuntamente cometió, recomendó el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que se diera a conocer que la Fiscalía General de la República investiga a funcionarios y exfuncionarios de la Consejería Jurídica de la Presidencia por posibles actos de extorsión, y que uno de los denunciantes es, precisamente, el abogado de Carlos Salinas de Gortari.
Lo que le diría al señor Collado, indicó el primer mandatario en su conferencia matutina, es “que no esté pensando que porque Salinas es su amigo, y Salinas tiene mucha influencia en el [diario] Reforma porque de eso no hay duda, y que el Reforma está en contra de nosotros, que eso le va a ayudar. No. Si él cometió un error y está demostrado, y tiene ese dinero en el extranjero: que repare el daño y que busque un acuerdo, eso es lo que yo le recomendaría. Pero intentar mediante una campaña mediática defenderse, [pues] ya no es el tiempo de antes”.
Agregó que los abogados de Collado deberían ir a la Fiscalía General de la República para ello. Indicó que “en todos estos casos mi planteamiento ha sido el que se procure la reparación del daño, que devuelvan el dinero, para ser claros”.
El presidente López Obrador dijo que “si hay pruebas de que hubo desvío de recursos, que independientemente del castigo jurídico, legal que deben de recibir estas personas, que se tome en consideración la devolución del dinero”.
Al respecto, señaló que eso se hace en otros sistemas de justicia, como es el caso de Estados Unidos, donde “incluso recuperan hasta dinero que es nuestro y por lo general no lo devuelven a México. Entonces, yo eso es lo que he recomendado. En todos estos casos, aunque parezca increíble, no he tenido injerencia porque son asuntos que maneja la Fiscalía”.
Asimismo, expuso que a él le consta que Juan Collado es y era abogado del expresidente Carlos Salinas de Gortari, pues cuando sucedió lo de los videoescándalos de presuntos sobornos del empresario Carlos Ahumada, el ahora presidente era jefe de gobierno de la capital. Al respecto, indicó: “Salinas hizo gestiones en Cuba para que se protegiera a Ahumada y luego el gobierno de Cuba se dio cuenta de que era trampa porque estaban quedando como encubridores. Y yo hice un reclamo como jefe de gobierno al gobierno cubano, en su momento, y hubo una respuesta favorable en ese entonces, dije que cómo un gobierno revolucionario iba a terminar protegiendo a delincuentes, sólo por la amistad con Carlos Salinas. Entonces, el que fue a defender a Ahumada fue este señor Collado. Esto que les estoy relatando tiene casi 20 años, entonces desde entonces”.
Luego de narrar esta anécdota, afirmó: “no volví a saber nada de él ni tengo ningún problema con él. Lo que supe fue cuando lo detuvieron, que estaba comiendo con el dirigente del [Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, Carlos] Romero Deschamps, el anterior secretario del sindicato petrolero, y me dicen que cuando llega la policía, los de la Fiscalía, pues todos pensaban que se iba a detener a Romero Deschamps porque este señor era el abogado de muchos potentados, y no, era a él. Entonces, así me entere que lo habían aprehendido y ya después que era por un dinero que tenía en el extranjero, un asunto de recursos”.
El presidente López Obrador agregó que, una vez encarcelado, su familia buscó la manera de que fuera en libertad como enfrentara el proceso penal. “Me plantearon que si había posibilidad de que él pudiera defenderse y que saliera de la cárcel, incluso sus hijos. Por respeto a la familia, lo que dije [fue]: que repare el daño, que devuelvan el dinero.”
El primer mandatario recordó que hubo una propuesta por parte de la familia de Collado: “me acuerdo que, no sé si antes de eso o después de eso, me mandó a decir que quería él entregar 500 millones de pesos para la compra de unos boletos de [la rifa] del avión presidencial, y a la persona que me dijo le dije: ‘no. No es a mí quien me tiene que dar [el dinero] o al gobierno. Tiene que llegar a un acuerdo con la fiscalía, de reparación de daño”.
Al respecto, también dijo que, por ley, todo lo que recupera la Fiscalía General de la República lo tiene que entregar al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado. Tal como sucedió con el dueño de Altos Hornos de México, Alonso Ancira.
Sobre este último caso, López Obrador expuso que el empresario –quien sí libró la cárcel al comprometerse a reparar el daño a la nación que causó la compraventa de la planta chatarra de Agro Nitrogenados–ya devolvió 50 millones de dólares. Este dinero, dijo el presidente, se invirtió en la producción de fertilizantes que se entregan a los campesinos.
Respecto de la denuncia en contra de la supuesta red de abogados que se habrían coaligado con servidores públicos de la Consejería Jurídica de la Presidencia, López Obrador indicó que se debe investigar por parte de la FGR. “Que la Fiscalía investigue si el señor [Juan Collado] fue, como dice, sobornado o amenazado”.
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