La voluntad del pueblo no se negocia, responde Sheinbaum al ministro Carrancá

La voluntad del pueblo no se negocia, responde Sheinbaum al ministro Carrancá

Proyecto del ministro Carrancá es inconstitucional: presidenta (reporte brindado en la conferencia presidencial)
FOTO: CUARTOSCURO

“No se puede negociar lo que ha decidido el pueblo y lo que ya es Constitución”, respondió la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo al ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien en una entrevista aseguró que con su proyecto busca “una negociación”, como si la reforma al Poder Judicial de la Federación aún estuviera en discusión y no fuera un hecho consumado en la carta magna.

“¿Con quién quieren una negociación? ¿Con la presidenta? La presidenta lo único que hace es publicar en el Diario Oficial [de la Federación] lo que decide el Constituyente”, es decir el Poder Legislativo, que además es el único Poder que puede realizar modificaciones a la Constitución. O sea, critican el ‘poder unipersonal’ estos personajes –sí los han leído– o sea, dicen: ‘en contra del poder unipersonal que ejerció el presidente López Obrador y que ahora quiere ejercer la presidenta’, pero piden que la presidenta negocie algo que ya decidió el Constituyente”, puntualizó la jefa del Ejecutivo.

Asimismo, Claudia Sheinbaum reiteró que el proyecto presentado por el ministro González Alcántara Carrancá –que busca anular parcialmente las modificaciones constitucionales– “pone en duda la posibilidad de decidir del pueblo. ¿Es que no se han dado cuenta que México ya cambió?”

En su conferencia desde Palacio Nacional, cuestionó que la oposición asegure que en México no hay democracia: “¿cómo no va a ser democracia elegir a jueces, ministros y magistrados?, ¿no es democracia eso?” Finalmente les preguntó: “¿el dedazo sí es democracia?, ¿el dedazo garantiza la autonomía del Poder Judicial, pero la elección del pueblo al Poder Judicial no garantiza la independencia?”

Lo anterior, porque durante el sexenio de Ernesto Zedillo se designó una Corte a modo: “no sé si se fijan en la contradicción de sus argumentos, son argumentos que no tienen sustento”, concluyó la presidenta.