En caso de que la oligarquía regrese al poder, los programas sociales –como la pensión universal a adultos mayores– e incluso los derechos, como el de la gratuidad en salud, sí están en riesgo a pesar de estar plasmados la Constitución, sugirió el presidente Andrés Manuel López Obrador. Por ello, recomendó al pueblo no dejarse manipular: “¡ojo, mucho ojo! ¡Cuidado con el doble discurso, con la doble moral, porque son muy cínicos: como dicen una cosa dicen la otra”.
Sin mencionar al PRIAN ni hacer señalamiento directo a sus campañas políticas, el primer mandatario advirtió: “me llama la atención que ahora dicen: ‘no que se preocupen [los programas no van a desaparecer porque están en la Constitución]’”, a lo que cuestionó: “¿qué, es de corazón, es sincero de que van a seguir apoyando al pueblo? Lo que diga mi dedito [mientras su dedo se movía indicando: no]”.
López Obrador acusó que “ahora los que decían que eso era populismo y paternalismo –y que todavía hablan de que somos comunistas y populistas y dictadores, autoritarios y antidemocráticos– ahora, porque así son muy convenencieros –la palabra, el término, el concepto que los define muy bien es hipocresía–, ahora que necesitan de la gente, porque creen que el pueblo es tonto, y tonto es el que piensa que el pueblo es tonto, ahora están hablando de que sí apoyan todos los programas de Bienestar después que estaban en contra. Ahora dicen que todos los programas de Bienestar van a seguir. Yo nada más quiero recordar algo: ellos le quitaron a la Constitución del 17, la Constitución que surgió de la Revolución Mexicana, le quitaron todo lo que tenía que ver con la justicia social”.
Con la enseñanza de la historia reciente del país, el presidente de la República advirtió al pueblo de México no basta con que ya esté elevado a rango constitucional el derecho a la salud, y el derecho a la gratuidad y el derecho a los adultos mayores a una pensión, porque, recordó, el expresidente Carlos Salinas modificó el artículo 27 constitucional para privatizar el ejido. Por ello, cuestionó: ¿que no pueden ellos llevar a cabo otras contrarreformas, como lo han hecho? ¿Qué fue lo que hicieron con las reformas a las pensiones, no fue un retroceso? ¿Que no se dedicaron en 36 años a reformar la Constitución para favorecer a una minoría rapaz en contra de los intereses del pueblo, con la complicidad del Poder Judicial? ¿Que no reformaron la Constitución para imponer la llamada reforma energética?
Con efusividad, López Obrador señaló que ellos, en referencia a los oligarcas y conservadores, “no le tienen amor al pueblo, le tienen amor al dinero, ese es su Dios, hablando en plata, pero si no hablamos así nos quedamos con las medias tintas y nadie nos va a entender, y como que ya es tiempo de llamarle a las cosas por su nombre”.
El titular del Ejecutivo federal consideró que las conferencias son muy importantes y necesarias, “porque si no pues estaríamos desprotegidos frente a la manipulación de los medios y a los intereses, porque imagínense cómo están los contratistas del antiguo régimen, o los que vendían las medicinas, o los que estaban a favor de la privatización de la salud: enojadísimos, como Krauze, como Aguilar Camín o Castañeda y todos. Los entiendo, pues imagínense cuánto recibía Aguilar Camín del gobierno, sus empresas editoriales, o Krauze, se rayaban. Entonces es normal que estén enojados”.
Por ese enojo, el presidente AMLO consideró, es que lanzan campañas de propaganda negra: “muchos rumores y desinformación y calumnias, y hay que estar informando, informando, informando. Y “en el caso de la gratuidad ya llegó para quedarse la salud no es un privilegio. Es un derecho del pueblo, ya está establecido en la Constitución, la gratuidad”.