Será hasta después de las elecciones del próximo 5 de junio cuando la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) analice las controversias constitucionales sobre la validez del desafuero en contra del gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, así como de la orden de aprehensión que pesa en su contra a solicitud, ambas cosas, de la Fiscalía General de la República.
El mandatario tamaulipeco está señalado de tener presuntos nexos con el Cártel de Sinaloa y con organizaciones criminales de Colombia. La Primera Sala debía discutir este día a las 2 de la tarde los amparos 50/2021 y 70/2021, que presentó el Congreso de Tamaulipas, por considerar que el Congreso federal se excedió en sus facultades al determinar el desafuero del aún gobernador.
La ponencia de este caso recayó en el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá. Dicho proceso de desafuero inició en la Cámara de Diputados el 23 de febrero de 2021, a solicitud de la FGR. García Cabeza de Vaca está imputado de incurrir presuntamente en delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y fraude fiscal.
En la futura discusión de la Primera Sala, se espera que los ministros determinen si el gobernador tiene fuero y, por tanto, si es procedente o no la orden de aprehensión en su contra que otorgó a la Fiscalía General de la República el juez de distrito especializado en el Sistema Penal Acusatorio en el Estado de México, con residencia en Almoloya de Juárez, por los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
De acuerdo con su expediente criminal, del que Contralínea tiene copia, hay evidencias de que utilizó recursos públicos para beneficio propio en la adquisición de inmuebles y otros bienes, simulando contratos con empresas fantasmas. García Cabeza de Vaca es investigado no sólo por autoridades de México, sino también de Estados Unidos por sus presuntos vínculos con cárteles de México y de Colombia.
El expediente criminal describe detalladamente las empresas fantasmas que fueron utilizadas por García Cabeza de Vaca, los nombres de todos sus cómplices; los familiares involucrados, que incluye a esposa, hijos y hermanos; las propiedades y otros bienes adquiridos con dinero sucio; los múltiples viajes realizados al extranjero, así como intrincadas operaciones financieras que permitió al mandatario tamaulipeco acumular cientos de millones de pesos producto del narcotráfico que fueron cruzados por varias empresas para ocultar el origen.