La Central de Estudiantes Universitarios (CEU) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) propone al ganador de las elecciones pasadas, Andrés Manuel López Obrador, una Reforma Universitaria. La organización se pronuncia a favor del aumento de la matrícula y el acceso universal a la educación superior y media superior.
La CEU, que agrupa a representantes y organizaciones de más de 35 mil estudiantes, también demanda al próximo presidente de la República destinar el 8 por ciento del producto interno bruto para la educación y el 1 por ciento para ciencia y tecnología, estándar recomendado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por su sigla en inglés). Además de garantizar la movilidad, alimentación, el mejoramiento de infraestructura; así como la implementación de medidas eficaces contra la violencia en los campus, a través de un comunicado.
La Central se muestra optimista para la realización de estas propuestas, pues la coalición más votada tendrá una mayoría en el Congreso de la Unión, y con el diálogo entre el poder ejecutivo, legisladores, autoridades universitarias, especialistas y estudiantes, considera, no habrá obstáculos para iniciar la Reforma Universitaria estructural que dé fin a la exclusión de miembros de las clases más desfavorecidas.
“Esta reforma podría salir de una iniciativa de López Obrador, que al entregársela al Congreso de la Unión podría verse realizada pronto. Una propuesta que podría retomar el presidente es la eliminación de la junta de gobierno, pues son pocos integrantes los que deciden el destino de la universidad, y también que se democratice el Consejo Universitario que es nuestro máximo órgano de toma de decisiones y adopte un modelo de cogobierno”, señala, en entrevista con Contralínea, Miriam Estrada, Consejera Académica de la Facultad de Derecho e integrante de la CEU.
Para que tales acciones sean efectivas, la organización sugiere a la UNAM actualizar su Ley Orgánica por considerarla obsoleta, y advierte que se necesita fortalecer los procesos de democratización, transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción al interior de los propios centros de enseñanza.
“También es necesario que tome en cuenta la actualización de los planes de estudio para que éstos no estén destinados a contenidos muy concretos para servir sólo a las necesidades de las trasnacionales, sino que estén orientadas a un contenido social y que estas incentiven, impulsen y apoyen a mejorar la industria nacional”, finaliza Estrada.