Siete de cada 10 personas con discapacidad no trabajan ni buscan empleo, debido a las barreras sociales, culturales e ideológicas que no les permiten participar en el mercado laboral ni recibir formación, reveló una nueva base de datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Asimismo, señaló que las personas con discapacidad suelen percibir un ingreso inferior en comparación a otros trabajadores. Ello repercute directamente en su poder adquisitivo y nivel de vida, pues “se ven limitados en su capacidad de consumo y expuestos a un mayor riesgo de caer en la pobreza”.
De acuerdo con la OIT, “la inactividad laboral y los trabajos mal pagados muchas veces suelen orillar a las personas con discapacidad a aceptar trabajos en la economía informal, caracterizada generalmente por la falta de seguridad y de prestaciones”.
Asimismo, señaló que las barreras laborales suelen aparecer entre los 15 y 29 años de edad. En este lapso, agregó, las personas con discapacidad tienen hasta cinco veces más probabilidades de estar fuera del sistema educativo y de no trabajar o formarse igual que sus compañeros. Asimismo, las personas con discapacidad tienen el doble de probabilidades de tener un nivel educativo inferior al básico.
De acuerdo con la base de datos, la tasa de personas con discapacidad empleadas disminuyó significativamente entre 2019 y 2020, debido a la emergencia sanitaria por la Covid-19. “Las mayores pérdidas de empleo se produjeron en los sectores del comercio minorista y la hostelería, donde suelen trabajar muchas personas con discapacidad”, explicó la OIT.
Por otra parte, la Organización Internacional del Trabajo señaló que en los 60 países de los que se dispone datos, se reveló que la tasa de inactividad de las mujeres con discapacidad es superior a la de las mujeres sin discapacidad, y a la de los hombres con y sin discapacidad.
Te puede interesar: Exhortan a reconocer distrofia muscular como enfermedad rara